Además de la unidad que circula por Goteborg, durante el mes de junio han comenzado a trabajar seis unidades más en Londres, de doble piso, y se realizarán más entregas antes de que finalice el año, aunque la producción en serie está prevista para la primavera de 2010.
Edward Jobson, director de Medio Ambiente de Volvo Buses, fue el encargado de repasar la evolución de los híbridos en Volvo, desde sus primeros conceptos a mediados de la década de los '90, hasta la actualidad, junto con un análisis de los combustibles alternativos que existen en el mercado y sus características. "En 2003, Volvo decidió que su desarrollo híbrido sería aplicable tanto a camiones como a buses, y también para la maquinaria de construcción, bajo un mismo sistema. Desde entonces, hemos trabajado para integrar el hardware y el software del sistema con la caja de cambios, el motor y el resto de componentes al sistema", apunta.
En cuanto al híbrido, destacó que "sólo emite un 15% del CO2 por persona y kilómetro en realción con el coche, mientras que un bus tradicional emite un 20%", por lo que la ganancia es evidente. Para Jobson, "el metano y el DME serán los combustibles alternativos del futuro, pero el sistema híbrido es el más eficaz de los que tenemos disponibles actualmente, hasta 2012 por lo menos, más aún si se combina con biodiesel o con diesel sintético".
Durante su intervención, el responsable de Medio Ambiente de Volvo Buses comparó el coste de los vehículos durante toda su vida útil, y el de un vehículo Euro 6 es sólo un 15% sobre un Euro 4. Una de las razones es que el 7700 Hybrid "recupera hasta el 80% de la energía generada por la frenada, siendo el que más de los híbridos que están en el mercado, y puede reducir hasta un 30% el consumo". En cuanto a su potencia, tanto el motor diesel (de 220 CV) como el eléctrico entregan un par motor de 800 Nm cada uno, "por lo que la potencia es más que suficiente para que el bus arranque sólo con el motor eléctrico, entrando a funcionar el diesel cuando alcanza una velocidad de 15-20 km/h. Empujan juntos, gracias a la tecnología paralela, hasta que la velocidad es mayor, momento en que se desconecta el eléctrico". La colocación vertical y trasera del motor permite una capacidad a bordo de hasta nueve personas más.
Baterías y consumo
Las baterías del sistema híbrido de Volvo, que se denomina I-SAM, pesan 200 kg y tienen una duración mínima de tres años, según las pruebas de la marca, "aunque la segunda generación de híbridos, en la que trabajamos, podría elevar hasta seis años su duración". Incorporan un sistema de refrigeración de la batería por agua, patentado por Volvo.
El consumo, por último, es otra de las ventajas del 7700 Hybrid. El primer mes de pruebas en Goteborg, en condiciones reales de tráfico y con viajeros, arroja un ahorro del 32%.
