Así, según el informe, si se maneja el GPS circulando a 90 km/h, el conductor deja de percibir la mitad de las señales de la vía, al tiempo que su velocidad media baja un 15%, mientras que la distancia con el coche que le precede aumenta de forma exagerada, en más de 80 metros. Además, también crece considerablemente el tiempo de reacción.
Asimismo, circular por una carretera recta a 90 km/h e introducir datos en este dispositivo puede suponer una variación de tres metros en el control lateral del coche, lo que puede provocar una salida de vía o invasión de carril contrario. Por otro lado, los riesgos se agravan, sobre todo, en las rectas, donde el conductor "se siente más seguro y presta más atención al GPS", según revela el informe, que también recuerda que en España se venden anualmente más de 1,5 millones de estos dispositivos.
El responsable técnico del estudio, Pedro Valero, ha recordado que "probablemente antes de fin de año", la manipulación del GPS durante la conducción sea calificada como falta grave, según el Proyecto de Ley de modificación de la actual Ley de Tráfico. De este modo, esta falta conllevaría la retirada de tres puntos del carné de conducir, de forma que sería equiparada a la infracción por la utilización del móvil, sancionada con una multa de 150 euros.
Valero ha destacado que "actualmente no hay una legislación concreta" sobre la cuestión, si bien se puede sancionar este uso al igual que "cualquier elemento que pueda distraer". "Entra en la categoría de conductas inadecuadas pero no tiene asignado un número de puntos todavía", recordó el experto, miembro del Instituto de Tráfico y Seguridad Vial de Valencia (Intras). También recordó que, según datos de la DGT, la distracción aparece como factor concurrente en el 37% de los accidentes de tráfico.
Recomendaciones
Por su parte, la directora de comunicación externa de Línea Directa, María Paramés ha recomendado para un uso correcto de estos dispositivos, "planificar la ruta antes de ponerse en marcha, situarlo de forma que no obstaculice la visión, evitar manipularlo durante la conducción, anclarlo firmemente y no tenerlo suelto en el salpicadero o el asiento del copiloto, evitar colocarlo en zonas de airbag, bloquear su uso cuando se está en marcha, dejar que sea el copiloto quien lo manipule o actualizar el software".
Para llevar a cabo este análisis, Intras ha realizado un experimento con un simulador de conducción modelo Simuveg, en el que tomaron más de cien medidas de cada variable por kilómetro, con un total de 1.776 medidas por conductor, tales como el control lateral, el control longitudinal, la velocidad, la percepción de señales o la distancia de seguimiento, entre otras.
