La idea de la reunión de hoy es intentar que se firme el convenio colectivo y terminar así con posibles nuevos paros.
Si bien los paros matutinos realizados el fin de semana -de 5:00 a 8:00 horas- no tuvieron mayor repercusión entre los usuarios, sí se sintieron los realizados por las tardes -de 20:00 a 23:00 horas-, sobre todo en centro y en las principales zonas comerciales de la ciudad.
Habiéndose cumplido este domingo el séptimo y último día de huelga de los urbanos, el calendario de la plantilla fija para el día 24 de enero la próxima cita de la protesta.
Mientras, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, mantiene su intención de recurrir a un laudo para frenar los paros en el caso de que no se firme un acuerdo este mismo mes.
Denuncias de presiones
Fuentes de Tuzsa han informado que durante los horarios de paro los servicios se han situado entre el 60 y el 65%, cumpliéndose holgadamente con la orden del Ayuntamiento de Zaragoza, que establece unos servicios mínimos del 50%. La explicación es que algunos conductores que podrían acogerse a la huelga no lo han hecho. El comité, por su parte, reconoce que algunos miembros de la plantilla apoyan la movilización pero "tienen más difícil sumarse al paro porque acaban de llegar y aún no tienen contrato fijo", según declaraciones del presidente de la representación sindical, Javier Anadón. Además, según Anadón, algunos conductores en huelga han sido sustituidos por otros realizando horas extraordinarias. "Hay casos y los denunciamos, pero es lamentable", señaló.
"Lamentamos que, ante la actitud de la empresa, nos hayamos tenido que meter en una nueva semana de paros", continuó el líder sindical, quien también señaló su satisfacción por el desarrollo de la huelga, "que ha sido secundada casi por el cien por cien de los trabajadores".
