Las ampliaciones significativas de suelo urbano y urbanizable, como los complejos sanitarios y los polígonos industriales o residenciales, y todas las ordenaciones urbanísticas en Galicia, tendrán que ir de la mano con "un plan metropolitano de transporte público o un plan coordinado de transporte", indicó Caride durante la presentación, siendo ésta una de las principales novedades que aporta la nueva ley autonómica en la región. Del mismo modo, el anteproyecto de ley prevé la creación de diversos consorcios metropolitanos de transporte, fórmula elegida para planificar, ordenar y coordinar las necesidades comunes en materia de transporte público entre ayuntamientos próximos.
La pertenencia mínima en los consorcios será de ocho años, buscando "estabilidad", según la conselleira, y una dotación a los servicios de transporte público de tarifas zonales que no penalice el transbordo. Para Caride, esto representa "un claro y decidido impulso al transporte metropolitano" con el que se intenta poner a disposición del usuario "un servicio de calidad a coste reducido".
Touriño: "Una prioridad"
Por su parte, Pérez Touriño destacó que "el fomento e impulso del transporte público es una prioridad" para su Ejecutivo, recalcando que la nueva normativa será esencial porque Galicia "necesita de una modernización integral del sistema de transporte público".
Touriño explicó que los objetivos básicos de la ley son potenciar el uso del transporte público, potenciar la movilidad en los ámbitos urbanos, mejorar la movilidad de los entornos rurales o de baja demanda, mejorar la calidad del servicio, favorecer el desarrollo del sector, incrementar la seguridad viaria y disminuir la contaminación y el consumo energético.
