El Gobierno francés ha completado recientemente la comprobación para garantizar la plena operatividad del sistema entregado por su socio Ecomouv, responsable del diseño del dispositivo para la recogida y el control automático de los impuestos ambientales en los camiones. Una prueba del dispositivo a nivel nacional de forma voluntaria y sin fase de recaudación de impuestos comenzó el pasado 29 de julio.
Las auditorías realizadas este verano por el país reveló fallas persistentes que deben ser corregidas antes de la puesta en marcha del dispositivo. Por lo tanto, el Gobierno francés no ha aceptado validar la capacidad del Estado para el buen funcionamiento del sistema y está por tanto obligado a posponer la entrada en vigor del impuesto al 01 de enero 2014 en lugar del 1 de octubre de 2013, como tenía estipulado en un comienzo.
El Gobierno francés ha hecho hincapié en que los retrasos en la aplicación de los impuestos ambientales se explican en gran medida por la falta de preparación del equipo y para anticipar las dificultades durante el gobierno anterior.
Ecotasa francesa
La tasa para vehículos pesados es uno de los proyectos de la ley Grenelle de Medio Ambiente que se aplicará igualmente a los vehículos franceses como vehículos extranjeros. El Ministerio francés de Ecología, Desarrollo Sostenible, Transportes y Vivienda ha elaborado esta ecotasa en colaboración con el consorcio Ecomouv', la empresa encargada de la implementación de la tasa. Este sistema de tasación ecológica es un canon kilométrico para que los vehículos pesados paguen por el uso de la red nacional de carreteras sin concesión.
La medida afecta a todos los vehículos de transporte de mercancías de más de 3,5 toneladas que circulen por los 15.000 km de la red nacional de carreteras sin concesión (autopistas gratuitas, carreteras nacionales), y algunas carreteras provinciales que puedan verse afectadas por tráfico.
La recaudación de la tasa para vehículos pesados se destinará a la Agencia de Financiación de Infraestructuras de Francia (AFITF) y a las colectividades territoriales. Una parte de los ingresos de la tasa de circulación se invertirá básicamente en el desarrollo de infraestructuras y de proyectos previstos por la Grenelle de Medio Ambiente en favor del medio ambiente y del fomento del desarrollo sostenible.
El objetivo de esta tasa es instaurar una fiscalidad equitativa para todos los vehículos pesados con independencia de su nacionalidad y, sobre todo, favorecer la transferencia modal por la repercusión de la tasa en los cargadores. La finalidad es incitar a estos últimos a que influyan en la elección de otros modos de transporte como el flete marítimo o el flete ferroviario.
