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El grupo Goodman confirma la venta de su división de inversión inmobiliaria a Aberdeen Asset Management

GPI se incorpora a la estructura empresarial de API en una operación cerrada en 139 millones de euros

lunes 12 de mayo de 2008, 01:00h

Goodman, grupo inmobiliario integrado que invierte, desarrolla y gestiona espacios industriales y de oficinas, acaba de cerrar un acuerdo para la venta de su división de inversión inmobiliaria GPI (Goodman Property Investors) a Aberdeen Asset Management por 139 millones de euros.

Esta venta concluye con éxito el proceso de revisión de las opciones estratégicas para GPI iniciado por Goodman a finales de 2007. GPI es un proveedor de servicios inmobiliarios directos e indirectos que incluyen inversiones individuales y fondos colectivos en activos inmobiliarios en todo Reino Unido y otros mercados internacionales. Cuenta con una larga trayectoria en términos de crecimiento de sus activos bajo gestión, lo que le ha llevado ganar diversos premios del sector el año pasado.

El actual equipo humano y de dirección de GPI pasará a formar parte de Aberdeen. En concreto, John O’Connor se convierte en director gerente de Aberdeen Property Investors (API) en Reino Unido, y Andrew Smith, ocupa el mismo cargo de Gestión de Fondos y Fondos Indirectos de API. Ambos estarán bajo la dirección directa de Richard Backlund, consejero delegado de API.

Expansión mantenida

Richard Backlund ha señalado que "hemos seguido el crecimiento y expansión continuados de GPI durante algún tiempo. Estamos encantados de adquirir el negocio y poder comenzar a trabajar a partir de esta plataforma y oferta de producto globales. GPI viene acompañado de uno de los mejores equipos de dirección de todo el mundo y es absolutamente complementario con nuestro negocio a todos los niveles. Esta operación permitirá que nuestros activos bajo gestión se sitúen en más de 30.600 millones de euros a nivel global, convirtiéndonos en uno de los líderes de la gestión de fondos de Reino Unido.

Por su parte, Michael O’Sullivan, consejero delegado europeo de Goodman, matiza que "desde la adquisición de Arlington en 2005, hemos impulsado el crecimiento de nuestro modelo de servicio integrado al cliente, tanto desde el punto de vista orgánico como mediante adquisiciones. Contamos con una fuerte plataforma de negocio europea con un gran potencial de crecimiento continuado tanto para parques logísticos como empresariales y la región europea continúa siendo fundamental para nuestro modelo de negocio, proporcionando un alto porcentaje de los ingresos de Goodman".

La conclusión de la venta está sujeta a la aprobación de la Autoridad de Servicios Financieros de Reino Unido.