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MEDIO AMBIENTE

Thermo King contribuye con las zonas de baja emisión mediante su sistema criogénico de control de temperatura

Ayuda a conseguir los estándares de calidad estipulados por las autoridades de las principales ciudades europeas

martes 20 de mayo de 2008, 01:00h

Más de 70 ciudades de ocho países de toda Europa, entre las que se encuentran Londres, Berlín, Ámsterdam, Rótterdam y Utrecht, poseen, o están preparando, "Zonas de baja emisión" o "Zonas medioambientales" con el fin de alcanzar los estándares de calidad del aire relacionados con la salud.

Las zonas de baja emisión son áreas en las que se regulan los vehículos que más contaminan. En estas zonas es posible que estén prohibidos los vehículos, a los que se puede llegar a multar si acceden a ellas y sus emisiones están por encima del nivel establecido. En este contexto, en el que las autoridades municipales de las principales ciudades europeas se muestran cada vez más preocupadas por la calidad del aire y los niveles de ruido, al tiempo que se ha invertido la tendencia de mudarse fuera de estas grandes ciudades debido a los gastos derivados del desplazamiento  y a la pérdida del tiempo libre asociada a los atascos, Thermo King ha patentado su sistema criogénico de control de temperatura.

Para Joe Grealy, director de Relaciones Estratégicas de la Industria de Ingersoll Rand Climate Control Technologies ESA, "aquellos que regresan a los núcleos urbanos más importantes esperan poder disfrutar de una calidad de aire y de niveles de ruido adecuados. Además, necesitan poder comprar en el área y esperan disponer de una amplia variedad de alimentos las 24 horas del día", generándose una situación contradictoria: "En un intento por alcanzar esos objetivos de calidad de vida, algunas autoridades municipales han impuesto restricciones temporales o parciales en el acceso a las zonas céntricas de las ciudades para cierto tipo de vehículos durante el horario nocturno", explica Grealy, lo que afecta el abastecimiento de dichas tiendas, y por ende la calidad de vida que se busca proteger.

Funcionamiento del sistema

Con un sistema criogénico, el motor diésel se sustituye por un depósito de CO2 líquido. Aunque en principio pueda parecer que el uso de CO2 es contraproducente para el objetivo de reducir las emisiones de gases causantes del calentamiento global, el sistema utilizado por Thermo King es un producto derivado de otros procesos químicos industriales. Como se trata de un uso secundario del CO2, que no se obtiene directamente de la combustión de combustibles fósiles, no contribuye al calentamiento global. Cuando se precisa refrigeración, el CO2 líquido fluye desde el tanque de vacío aislado montado sobre el chasis del camión hasta el evaporador situado en el área de carga. A diferencia de otros sistemas criogénicos, en la zona de carga no hay CO2. Una vez que el CO2 atraviesa el evaporador, se expulsa a la atmósfera. Además de que las emisiones de gases del motor diésel se producen en el sistema mecánico, el sistema criogénico funciona de manera casi silenciosa, de forma que elimina el ruido y proporciona un beneficio doble a los residentes de las zonas interurbanas.

Grealy concluye que "la oferta de productos criogénicos de Thermo King es una solución ideal para lograr los competitivos objetivos de reducir la contaminación acústica y la atmosférica a la vez que proporciona a los residentes de las zonas interurbanas una amplia gama de productos perecederos sin que tengan necesidad de dejar la ciudad para desplazarse a los hipermercados de las afueras.