Esperanza en el sector y mucho optimismo es lo que se vio el pasado jueves en el II Foro Anfac y PwC 'Haciendo Industria' entre los fabricantes de automoción español. Pese a las buenas cifras de la industria, los presidentes de los principales grupos empresariales del área no quisieron dejar pasar la oportunidad para reclamar el Gobierno que continúe con sus planes de incentivos fiscales, como el PIVE y el PIMA, así como una solución al elevado coste de las tarifas de la luz.
Una financiación más competitiva clave
El presidente y CEO de IVECO, Jaime Revilla, fue sin duda el más combativo en sus reclamaciones. Para Revilla es esencial que el Ejecutivo establezca una línea de financiación mucho más competitiva y que incentive el I+D. "Tenemos que tener un coste energético más competitivo. No olvidemos que la industria es lo que más empleo crea", afirmó el CEO. El presidente de IVECO, como el resto de los asistentes alabó los planes PIVE calificándolos de "grandísimo acierto del Gobierno", por lo que pidió mantenerlos hasta que la situación económica vaya a mejor.
Revilla, para quien el PIVE de Transporte es fundamental, recalcó que España cuanta con una estructura industrial y una mano de obra cualificada que le hace ser líder. "Nunca seremos un país de low cost", añadió, para después aclarar que España es "el más competitivo de los países europeos" porque, entre otras cosas, se ha conseguido una mayor flexibilidad laboral. Otra de las reclamaciones de Revilla fue una modernización completa del parque de camiones, apostando además por la implantación de más centros de desarrollo. Un asunto en el que todos los ponentes que asistieron al foro coincidieron fue en la gran labor de los sindicatos del sector que se han sabido adaptar a las circunstancias.
El futuro del sector a debate
La II edición del Foro Anfac y PwC reunió en torno a una mesa redonda cuyo tema principal era 'La automoción 'liderando la recuperación' a varios altos ejecutivos de Ford, Peugeot-Citröen, Seat-Volkswagen, Grupo Antolín y Gestamp. A debate no solo la situación actual, sino el futuro del sector. "Los próximos cinco años van a ser apasionantes, declaraba un entusiasta Ramón Paredes, de Seat-Volkswagen. Más precavido se mostró el presidente y CEO de Ford en España, José Manuel Machado, para quién "el gran reto" será saber dónde se van a fabricar los coches del futuro.
Lo que todos tuvieron presente es que el cambio de la industria del automóvil ya ha empezado. "Conocemos los riesgos y por eso, somos capaces de buscar soluciones", apostaba el director del Centro de Madrid del grupo PSE, Peugeot-Citröen, José Carlos Robredo, recordando que el nuevo modelo Cactus de Citröen se fabrica en la capital y llega hasta los cinco continentes. Robredo, fue también muy crítico con el precio de la electricidad, ya que según sus datos, ésta es un 23,5% más cara en España que la media europea.
Más precisos en cuanto a su futuro inmediato fueron los responsables de las empresas auxiliares del Grupo Antolín y de Gestamp. Compañías que para Ernesto Antolín "son un matrimonio bien avenido, donde no puede haber uno sin el otro", en alusión a la relación entre fabricantes de vehículos y empresas auxiliares.
