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La manipulación de la señal que recibe el tacógrafo digital podría alterar el funcionamiento de otros sistemas

Continental reconoce que dicha señal se puede alterar, pero que conlleva un alto riesgo en seguridad

jueves 19 de junio de 2008, 01:00h

"Nuestro tacógrafo digital está sujeto a todas las homologaciones europeas, y no se puede manipular, aunque sí que puede verse afectado por alteraciones en los campos electromagnéticos que existen entre el sensor de movimiento y la caja de cambios", manifestó Eduardo González, director gerente de la compañía.

Estas fueron las principales explicaciones ofrecidas la semana pasada por los responsables de Continental Automotive Spain, la nueva compañía creada tras la integración de Siemens VDO en Continental. Su director gerente quiso recalcar que "el sistema no se puede manipular, sino que se actúa sobre la información que recibe. En el caso concreto de la colocación de un imán en la caja de cambios, éste hace que no llegue la señal correspondiente al sensor de movimiento, que a su vez la transfiere al tacógrafo digital para su almacenaje. Si no llega señal, graba datos como si el vehículo estuviese parado, pero no es así".

Ante esta situación, González quiso dejar claro que "es un fraude controlable, y fácilmente detectable, tanto a simple vista como mediante el control de los datos del vehículo por los organismos competentes".

Además, esta alteración de la señal "puede derivar en otros problemas de seguridad, porque sistemas del vehículo como el ABS o el cambio automático toman información del tacógrafo para su correcto funcionamiento, por lo que éste, en caso de emergencia, podría no ser el deseado, con el consiguiente perjuicio para la seguridad del conductor, del vehículo, y del resto de usuarios de la carretera".

Posibles soluciones

Una vez detectado el problema, el siguiente paso es encontrar soluciones. El director de la compañía asegura que "desde antes de conocerse estas alteraciones, la Comisión Europea tiene conformado un grupo de trabajo para mejorar tanto el producto en sí como la legislación que lo ampara, que actualmente no recoge ningún artículo al respecto de la conexión entre la caja de cambios y el sensor de movimiento".

Continental está trabajando y aportando su experiencia como fabricante (más de un millón de sus tacógrafos digitales están en circulación) para agilizar los plazos de las soluciones. "Una de las más fáciles de aplicar, a priori, sería que el vehículo, en caso de detectar anomalías en los datos recibidos, pudiera incidir sobre la inyección de potencia, limitándola a la mínima expresión", apuntó González para finalizar.