Así ocurrió en una conferencia organizada por la Unión Internacional del Transporte por Carretera (IRU) cuyo título era “El autobús y el autocar en una encrucijada: larga distancia e innovación” y en la que la Delegación de Fenebús en Bruselas participó el pasado 3 de marzo del presente año. El evento congregó a numerosos representantes del sector del autobús y del autocar de toda la UE y a otros interesados en el mismo. La conferencia se dividió en dos mesas de debate: una centrada en la liberalización del mercado de servicios regulares de larga distancia de transporte en autocar (de cuyas discusiones se da cuenta en esta noticia) y otra sobre innovación y revolución digital en el sistema de movilidad, dedicada a explorar los retos, oportunidades y amenazas que se le presentan al sector por este asunto (de la que se informa en otra noticia de este mismo boletín).
Diferencias por Países
En esa primera mesa sobre la liberalización del autocar se habló de la situación en Alemania, Francia e Italia así como se dio el punto de vista de un operador internacional (Eurolines) e intervino la Comisión Europea, que siempre ambiciona introducir más competencia en los mercados. En el debate no estaba previsto que se hablara del mercado español pero en las discusiones quedó claro que éste presentaba muchas más ventajas que el de los otros países.
Así, Christoph Gipp (del Instituto IGES de Alemania) explicó que el resultado de la liberalización en Alemania de los servicios regulares de larga distancia de transporte en autocar hace que la principal empresa (MeinFernbus Flixbus) tenga una cuota del 71% de mercado (siendo la cuota del segundo operador, Postbus, del 10%). También señaló que la liberalización ha conseguido que se haya multiplicado por 6 el número de viajes (4.585 frente a los 833 que había al principio del proceso en septiembre de 2012) y existan unas 320 líneas regulares en un mercado que movió 20 millones de pasajeros en 2015 y en donde el precio medio de los billetes ronda los 0,089€ en tarifa normal y los 0,036€ en tarifa reducida a fecha de enero de este año.
Representando a REUNIR, Gregory Carmona informó que Francia permite desde 2015 que se puedan operar servicios regulares de más de 100 km y regula con restricciones aquellos inferiores a esa distancia, algo que ha permitido crear un mercado de 4 millones de viajeros (potencialmente 5 millones para 2016) y en donde hay cinco principales operadores de servicios domésticos (Starshipper, Megabus, Flixbus, Isline y Ouibus) y 2 principales operadores en servicios internacionales (Eurolines y ALSA) a pesar del monopolio existente del ferrocarril en el país, de la fuerte cultura de uso del tren o de la falta de estaciones de autobús adecuadas. Sin embargo, alertó que la liberalización en Francia puede llevar en 3-4 años a un monopolio con pocas empresas importantes en el mercado y dejar sin oportunidades a las pequeñas y medianas empresas salvo que les subcontraten servicios.
En España 360 estaciones de autobuses o similares ofrecen el mismo acceso a todos los operadores con idéntico precio y condiciones
Fue entonces cuando Carmona aprovechó su intervención para ensalzar al modelo español de concesiones para servicios regulares de transporte interurbano de viajeros por carretera por conseguir que existan empresas grandes y a la vez ofrecer oportunidades para que las pequeñas y medianas puedan conseguir contratos públicos que les permitan crecer y desarrollarse, dejando así un mercado de 29 millones de viajeros para todos, en el que todos los operadores de servicios de larga distancia son entes privados y contando con más de 360 estaciones de autobuses o similares que ofrecen el mismo acceso a todos los operadores con idéntico precio y condiciones.
Posteriormente, Paolo Beria (universidad Politecnico di Milano) expuso que Italia liberalizó el transporte regular en autocar con un sistema de autorizaciones en enero de 2014 para poder operar y competir con cualquier servicio de autocar que conecte al menos 3 regiones, permitiéndose así mismo la competencia con servicios de transporte por ferrocarril (por precio y falta de servicios o frecuencias) y consiguiendo aumentar las conexiones en un 33% y los viajes en un 38% (sobre todo en el norte del país), haciendo que 19 empresas abriesen nuevas rutas y 10 cerrasen servicios (todas ellas pequeñas empresas pues las grandes aumentaron la oferta, dando síntomas de que el mercado empieza a concentrarse) así como atrayendo a empresas extranjeras (Flixbus, Megabus) y desarrollándose consorcios.
Por parte de la Dirección General de Movilidad y Transporte de la Comisión Europea, Ray Malanaphy informó que se está estudiando cómo introducir mejoras en el Reglamento 1073/2009 sobre acceso al mercado de servicios internacionales de transporte en autocar, entre las que buscaría medidas para garantizar la igualdad en el acceso a estaciones y para abrir el mercado de servicios domésticos regulares de transporte en autocar. No obstante y ante una intervención de la Delegación de Fenebús en Bruselas en el turno de preguntas interpelándole al respecto, Malanaphy precisó que esa apertura de servicios domésticos regulares sería para aquellos que no fueran obligación de servicio público.
Finalmente intervino el vicepresidente de Eurolines, Rui Silva, insistiendo en que la liberalización puede mejorar los estándares (apps para reservar billetes, billetes electrónicos, wifi a bordo, enchufes, más rutas, menores precios...) y posibilidades de elección de los consumidores. En el caso de la liberalización desde el punto de vista de las empresas, él prevé que a corto plazo los nuevos entrantes en el mercado quiten cuota a los que ya estaban y eso haga que solo sobrevivan los mejores. Pero a largo plazo, se mostró seguro que mayores inversiones colectivas en un sector liberalizado más fuerte podrían resultar en aumentos de la cuota de mercado frente a otros modos a través de una mejora en la elección del consumidor.
