Este almacén combina un sistema automático de preparación de pedidos vertical, que se integra con el sistema tradicional y permite con unos algoritmos automatizar el picking, con lo que se reduce el coste y los errores en preparación. La temperatura del almacén, que se ha desarrollado para dar servicio al sector farmacéutico y cosmético principalmente, siempre está entre los 18 y los 22 grados. En este sentido, cuenta con una zona vigilada y custodiada para los fármacos especiales.
El almacén dispone de 1.500 metros cuadrados y 5.000 huecos
La combinación de los sistemas de localización de los productos permite a Aza Logistics ofrecer un servicio rápido de picking ya que la tecnología incorporada reduce los tiempos de selección de los productos. Actualmente este almacén provee de servicios logísticos a la firma Sesderma, quien ha confiado en esta instalación para almacenar parte de sus productos. No obstante, Germán Monedero, gerente de la firma, reconoce que queda todavía capacidad de almacenamiento y de crecimiento. El almacén dispone de 1.500 metros cuadrados y 5.000 huecos.
Según el gerente, “uno de los objetivos de la compañía para 2016 es conseguir diversificar el tipo de cliente que usa esta instalación, además de afianzarse en los sectores actuales pharma y cosmético. En los próximos meses las empresas de alimentación puedan disponer de nuestras instalaciones. Tenemos el almacén perfectamente panelado para que los productos estén separados”.
Este almacén da empleo a 12 personas actualmente, pero Monedero confía en que “en los tiempos venideros podamos incorporar a más personal porque las perspectivas de crecimiento son optimistas”. La empresa de logística, división del Transportes Alfonso Zamorano, cerró el pasado ejercicio 2015 con una facturación de 4,8 millones de euros, un 30% más que el año anterior cuya cifra de negocio ascendió a 3,8 millones de euros. En total, la empresa cuenta con 65 empleados.
Otras instalaciones de Aza Logistics
Aza Logistics cuenta, además de este almacén de temperatura controlada de Picanya, con
otra instalación en el Parque Juan Carlos I de Almussafes donde da servicio a la industria de automoción de 18.000 metros cuadrados y otro almacén más en Beniparrell, con una superficie de 8.000 metros cuadrados. Monedero considera que “todavía nos queda mucho margen de crecimiento porque hemos ampliado las instalaciones de Almussafes y tenemos posibilidad de incrementar nuestro almacenaje. El reto es diversificar el negocio en el almacén de Picanya y aumentar el número de referencias en el centro de Almussafes”.
