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Anfac pide ‘moderación’ al Gobierno en torno a la problemática del diésel

Alerta de las graves consecuencias en empleo, industria y cambio climático

martes 17 de julio de 2018, 07:00h
Los 14,5 millones de vehículos de más de 10 años que circulan por España emiten un 90% más de emisiones de NOx y partículas que los actuales.
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Los 14,5 millones de vehículos de más de 10 años que circulan por España emiten un 90% más de emisiones de NOx y partículas que los actuales.
Más de 40.000 empleos y 17 fábricas de automóviles en España están directamente vinculadas a la producción y venta de vehículos diésel en España. Se fabrican más de 1,2 millones de vehículos diésel en el país al año. Es por ello por lo que la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) alerta de las graves consecuencias e implicaciones que las manifestaciones del nuevo Gobierno pueden tener de cara al empleo y a la producción de coches en España, que representa el 10% del PIB y emplea al 9% de la población activa.

“Los fabricantes están preparados para adaptarse a las políticas medioambientales y sociales, como ya han demostrado en el pasado, pero se necesita una transición ordenada y una gestión adecuada de estos cambios”



“Las plantas en España trabajan cada día en la adecuación de sus líneas de producción, para integrar cuanto antes las exigencias normativas medioambientales y todas las mejoras tecnológicas”, ha afirmado el presidente de Anfac, José Vicente De Los Mozos. Hasta 10.000 millones de euros invierten las compañías de automoción en el país en los últimos cuatro años, enfocadas en nuevas tecnologías y en innovación.

El presidente y el vicepresidente ejecutivo de Anfac, Mario Armero, se ha reunido con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, para presentarles “la estrategia de la industria de la automoción y establecer con ella un clima de trabajo y normalidad”, ha señalado Armero. El vicepresidente destaca que, en esa reunión, transmitieron a la ministra “la necesidad de trabajar conjuntamente en un nuevo modelo de movilidad cero y bajas emisiones; en atacar el envejecimiento del parque automovilístico y en desarrollar el mercado para el vehículo alternativo, con medidas concretas como la normativa del gestor de carga o la puesta en marcha del programa VEA de estímulos a la compra de vehículos híbridos, eléctricos y de gas. Todo ello para trabajar en la descarbonización del transporte y un nuevo modelo de movilidad y bajas emisiones”.


Argumentos de la asociación


La asociación resalta que esta persecución al combustible diésel se inicia “cuando los motores están más avanzados tecnológicamente que nunca”, incluso con las nuevas condiciones regulatorias de medición de emisiones impuestas en Europa. De hecho, desde que entró en vigor la normativa de motores Euro para los diésel en 1992, los vehículos emiten hasta 100 veces menos de NOx y partículas. “Los fabricantes están preparados para adaptarse a las políticas medioambientales y sociales, como ya han demostrado en el pasado, pero se necesita una transición ordenada y una gestión adecuada de estos cambios”, afirma el vicepresidente.

El incremento del parque en las ciudades y la creciente preocupación ciudadana por los efectos de la calidad del aire sobre la salud, imponen nuevos retos que deben ser afrontados recurriendo a nuevas mejoras de los sistemas convencionales y, sobre todo, a la renovación del parque. Los 14,5 millones de vehículos de más de 10 años que circulan por España emiten un 90% más de emisiones de NOx y partículas que los actuales. No hay ninguna iniciativa europea que tenga un calendario de prohibición de vehículos nuevos diésel, ni de vehículos de combustibles fósiles. Todas las que existen, están relacionadas con el establecimiento de una fecha, a medio-largo plazo, para la prohibición de los vehículos más antiguos, que son los responsables de la mayor parte de las emisiones, así como una de las principales causas de siniestralidad.

Por otro lado, la contribución de la tecnología diésel a la reducción de CO2 y a la mitigación del cambio climático es fundamental. “Si las compras de vehículos gasolina se disparan en detrimento del diésel, España tendrá dificultades de cumplir sus objetivos de reducción de emisiones de CO2 fijadas por la Unión Europea”, han afirmado desde Anfac.