• Las nevadas caídas en el centro de la península la semana pasada han afectado al normal desarrollo de la actividad de las plataformas logísticas de distribución y reparto de mercancías en la Comunidad de Madrid.
• Sin embargo, a diferencia de otros operadores logísticos que han buscado alternativas para que sus transportistas proveedores pudieran descargar las mercancías, en el caso de Amazon ha optado por dejar bloqueados a cientos de camiones en las puertas de sus instalaciones logísticas de Madrid y Toledo, durante siete días seguidos y en condiciones infrahumanas.
Como ha venido denunciando Fenadismer días atrás, los efectos de la borrasca Filomena se han dejado sentir especialmente en el sector del transporte por carretera, que durante la semana pasada y con ocasión de las nevadas, decenas de miles de transportistas permanecieron retenidos en muchos casos más de 72 horas seguidas en los márgenes de numerosas carreteras, bajo el argumento oficial de la seguridad y evitar el bloqueo de las vías de comunicación.
Aunque a lo largo del pasado lunes y martes la práctica totalidad de los “embolsamientos” de camiones llevados a cabo por los Agentes de Tráfico fueron siendo disueltos, permitiendo la circulación de los camiones tras el levantamiento de las restricciones que aún permanecían vigentes, muchos transportistas se encontraron inesperadas sorpresas desagradables al llegar a su destino, al haber afectado las nevadas caídas al normal desarrollo de la actividad de las plataformas logísticas de distribución y reparto de mercancías, especialmente en la Comunidad de Madrid.
Así, muchos operadores logísticos han optado por buscar alternativas a través de otros puntos de entrega para permitir que sus transportistas proveedores pudieran descargar las mercancías.
Sin embargo, ese no ha sido lamentablemente el proceder de Amazon, que según las numerosas denuncias de sus transportistas que están llegado a Fenadismer, la multinacional logística ha optado por dejar bloqueados a cientos de camiones en las puertas de sus Plataformas logísticas situadas en las provincias de Madrid y de Toledo, sin explicación alguna hasta ahora por parte de los representantes de Amazon. Además los transportistas están soportando la larga espera en condiciones infrahumanas, al no permitírseles acceder a servicios básicos y esenciales, como la utilización de sus aseos o poder adquirir alimentos, pese a que llevan paralizados ya más de 7 días, y con la previsión de que a corto plazo no se resuelva la situación que permitiera a los transportistas poder descargar las mercancías que transportan y continuar su actividad.