El objetivo: Ayudar en la digitalización. Será condición necesaria para poder solicitar la ayuda hacer un autoexamen de Nivel de Madurez Digital para identificar los Paquetes DTK que sean más adecuados.
Es el momento de aprovechar las ayudas europeas para prepararse para el futuro. Una gran parte de esas ayudas, aproximadamente un 35%, van destinadas a los procesos de transformación digital.
En esta línea el Gobierno de España ha desarrollado el Programa Digital Toolkit, con un presupuesto de 3.000 millones de euros, para proporcionar a las empresas ayudas no reembolsables que les permita adoptar un conjunto de herramientas digitales básicas, disponibles en el mercado, para lograr impulsar a corto plazo el proceso de digitalización del conjunto de la economía.
Gracias al conocimiento y experiencia en el Transporte, “VEOX puede ayudar a las empresas en el proceso, evaluando la situación actual y diseñando un plan estratégico encaminado a adquirir la madurez necesaria y los conocimientos para poder afrontar el cambio necesario para acometer el futuro”, afirma David Centeno, gerente de VEOX.
A la hora de afrontar la transformación digital, las PYME y autónomos deben afrontar el complejo proceso de cambio cultural y tecnológico que requiere la implantación de un proyecto de digitalización. La sensibilización del personal directivo y la mejora de sus competencias digitales son factores críticos para impulsar el necesario liderazgo que asegure el éxito del proceso de digitalización y el impacto de las inversiones.
La implantación del proyecto de digitalización puede requerir además el rediseño de procesos y del negocio, la capacitación digital del personal implicado, la selección y adopción de soluciones digitales básicas adecuadas, e incluso avanzadas, así como mejorar la conectividad y las medidas de protección frente a incidentes de ciberseguridad.
En muchos casos, puede ser necesario incorporar en la PYME un experto en transformación digital que actúe como piloto o agente del cambio.
En este proceso de digitalización las PYME pueden necesitar financiación, pero sobre todo acompañamiento, que se constituye en otro factor crítico de éxito. En particular, las PYME necesitan que mediante ese acompañamiento se les ofrezca información precisa y casos de éxito, se les asesore para conocer su nivel su madurez y se les recomiende un itinerario acertado y realista para su digitalización, pero también que se les ofrezca soporte en todo el proceso de implementación y, en su caso, en el uso eficaz de las ayudas públicas.
Las necesidades de digitalización dependerán del sector de actividad y del tamaño de la empresa, pero también del nivel de madurez digital medio del sector y de la empresa. No hay recomendaciones o recetas generales o automáticas que aplicar a todo el conjunto de las PYME del país, sino que es preciso tener en cuenta estas variables para asegurar el éxito del proceso de digitalización.
Con el fin de adecuar los servicios de digitalización a las especificidades de las distintas empresas, se han identificado en principio dos clústeres diferentes de beneficiarios, con necesidades y grado de digitalización diferente.
Por una parte, aproximadamente 145.000 pequeñas empresas (10 a 49 empleados). Por otra, aproximadamente 1.100.000 microempresas (1 a 9 empleados) y 1.600.000 trabajadores autónomos.
Las convocatorias podrán especificar las empresas elegibles por tamaño o por sectores de actividad económica con el fin de lograr un proceso eficiente para impulsar la digitalización.
Será condición necesaria para poder solicitar la ayuda hacer un autoexamen de Nivel de Madurez Digital para identificar los Paquetes DTK que sean más adecuados.
También será condición necesaria para solicitar la ayuda acreditar los requisitos para ser beneficiario de conformidad con la Ley General de Subvenciones y no superar el importe máximo de las ayudas de mínimas, entre otros.
Adicionalmente, se podrá requerir la superación de determinados umbrales de actividad para asegurar un mínimo de viabilidad empresarial, por ejemplo, sobre la base de información fiscal, de entidades financieras colaboradoras y agencias de información empresarial, etc.
A cada Paquete DTK le corresponderá un importe de subvención fija, que podrá modularse en función de diversos criterios: tamaño de la empresa, el nivel de complejidad del paquete o el sector de actividad, etc. En principio, con el fin de lograr un uso eficaz de los recursos públicos, se prevé que la subvención siempre sea inferior al coste mínimo de implantar el paquete. De este modo, la diferencia hasta el coste de implantación de la solución elegida será financiada por la empresa beneficiaria, creando incentivos para desplegarla activamente.
Se fijarán límites máximos de ayuda acumulada por empresa en el Programa.