Los sectores de la automoción, la generación de energía, la electricidad y las infraestructuras de recarga se han comprometido a desempeñar su papel en el camino hacia la neutralidad climática. De hecho, ya están aportando una serie de soluciones: desde la generación y distribución de energía con cero o bajas emisiones de carbono, pasando por soluciones de redes inteligentes, hasta vehículos con cero emisiones.