La Empresa Municipal de Transportes Urbanos de Gijón (Emtusa) ha presentado los seis primeros autobuses eléctricos de su flota, que comenzarán a operar el lunes 24 de febrero en la línea 4 'Lauredal-Viesques-Campus Universitario'. Esta incorporación forma parte del plan de renovación 2024-2027, que contempla la llegada de 21 vehículos eléctricos y 16 articulados híbridos.
Los vehículos presentan una autonomía de 300 kilómetros o 16 horas
Los nuevos autobuses son del modelo Urbino 12E, fabricados por Solaris, y cuentan con etiqueta cero emisiones. Su autonomía alcanza 300 kilómetros o 16 horas de servicio, gracias a 6 módulos de baterías de tipo NMC (Níquel-Manganeso-Cobalto), con una capacidad de 422 kW. Además, pueden recargarse en 3-4 horas con una potencia de carga de hasta 150 kW, tanto por enchufe tipo 2CCS como por pantógrafo invertido.
Estos vehículos están diseñados para optimizar la experiencia del usuario y mejorar la seguridad. Cuentan con piso bajo integral, arrodillamiento lateral, rampas eléctrica y manual, espacio para dos sillas de ruedas y capacidad para dos carritos de bebé. También incluyen una pantalla de información de gran tamaño, climatización y sistemas avanzados de asistencia al conductor, como detección de peatones y aviso de colisión, sistema de protección de punto ciego, asistencia de velocidad o frenado de emergencia
Para garantizar la operatividad de los autobuses eléctricos, EMTUSA ha adaptado sus cocheras con 90 puntos de carga, de los cuales 74 serán con pantógrafo invertido y 16 con cable estándar. La primera fase de la obra ha finalizado en febrero de 2025, incluyendo seis puntos de carga operativos y una mejora en la capacidad eléctrica, con la incorporación de dos centros de transformación que elevan la potencia disponible a 6 Megavatios.
La carga se realizará principalmente mediante pantógrafo invertido, un sistema automatizado que detecta el autobús y ajusta la carga según sus necesidades, garantizando mayor seguridad y eficiencia energética. Además, un software especializado gestionará la distribución de energía, optimizando los recursos y reduciendo el consumo innecesario.
Con esta modernización, Gijón avanza hacia un transporte público más sostenible y eficiente, en línea con sus objetivos de movilidad urbana ecológica.