El absentismo laboral ha alcanzado cifras históricas en España, con una prevalencia media de 53,3 bajas por cada 1.000 asalariados en 2024, el nivel más alto registrado desde 2007. Este fenómeno, que afecta directamente a la productividad, los costes operativos y el clima laboral, se ha visto agravado por factores como el envejecimiento de la población activa, los retrasos en la atención sanitaria pública y el estrés asociado al entorno laboral postpandemia.
Frente a este desafío, un número creciente de empresas está adoptando programas de conciliación y bienestar laboral como estrategia clave para reducir el absentismo y mejorar la salud integral de sus empleados.
Según datos de Vivofácil, compañía con más de 25 años de experiencia en la implementación de servicios de conciliación para más de 10 millones de usuarios, las organizaciones que han aplicado planes integrales de bienestar han logrado reducir el absentismo laboral en un 17,7% sobre el valor medio, además de registrar:
Estas cifras evidencian que apostar por la prevención y el acompañamiento durante las ausencias es una inversión rentable para cualquier compañía.
Los planes ofrecidos por Vivofácil se estructuran en tres líneas de acción:
Prevención: Evaluación de riesgos ergonómicos y psicosociales, programas de salud y bienestar, formación para líderes y empleados, y creación de espacios de relajación dentro de la empresa.
Intervención durante la ausencia: Plataformas digitales de gestión, apoyo psicológico y médico, planes de reincorporación progresiva y mantenimiento del vínculo entre trabajador y empresa.
Consultoría estratégica: Diagnósticos personalizados, análisis del marco legal sectorial, diseño de protocolos y elaboración de informes sobre el impacto del absentismo en productividad.
Además de la mejora operativa, estos planes permiten fidelizar talento, reducir la rotación, cumplir con la normativa vigente y mejorar la imagen de marca empleadora, aspectos cada vez más valorados por trabajadores y candidatos.
Juan José Muriel, CEO de Grupo Vivofácil, señala:
“En el escenario actual, donde el absentismo laboral representa un reto creciente, es fundamental que las empresas reconozcan el valor de invertir en el bienestar de sus empleados y en políticas de conciliación efectivas. Estas medidas no solo reducen las ausencias, sino que también promueven un entorno de trabajo más saludable, humano y productivo.”
Con estas iniciativas, las compañías no solo mejoran su eficiencia, sino que avanzan hacia un modelo organizativo más sostenible, empático y alineado con los retos del presente y del futuro del trabajo.