Las emisiones de gases de efecto invernadero del año 2008 se situaron en 405.048 kilotoneladas de CO2 equivalentes, lo que supone una reducción del 7,7% respecto a 2007. Aún así, se colocan un 39,8% por encima de las del año base del Protocolo de Kioto (1990), según los datos oficiales del Gobierno.
El Inventario Nacional de Emisiones de Contaminantes Atmosféricos, correspondiente a la serie temporal 1990-2008, publicado por la Secretaría de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y que ha sido remitido a Bruselas, refleja que el descenso de las emisiones se ha producido en un entorno de crecimiento económico del PIB del 0,9% y se ha debido principalmente a una mejora de la intensidad energética y a un cambio en el ‘mix’ de producción de energía, según el Ministerio, lo que supone un significativo incremento de las renovables y una disminución del uso del carbón como consecuencia de los precios relativos de los combustibles fósiles y del precio de la tonelada de CO2 en los mercados internacionales. También es achacable al menor uso de combustibles en el sector transporte y en determinadas actividades industriales como la fabricación de cemento. Además se han producido mejoras metodológicas en el cálculo de factores de emisión del sector transporte.