Antonino Burgos, junto con el director general de Obras Públicas y Transportes, Víctor Garrido, ha detallado las primordiales acciones que se promoverán este año con el claro fin de perfeccionar la red autonómica de carreteras, que se extiende a lo largo de cerca de 1.500 kilómetros.
"La conservación y la seguridad vial constituyen la prioridad en el ámbito de carreteras y, por ello, este capítulo lo preservamos de los ajustes durante los peores años de la crisis y optamos por aplazar hasta un mejor momento la construcción de nuevas infraestructuras viarias, que han cobrado ahora mayor impulso. Ahora que comienza a recuperarse la economía, todas estas actuaciones supondrán un especial estímulo de la economía y la creación de empleo en casi todos los rincones de la región".
El programa de mantenimiento y seguridad vial en carreteras en 2015 contempla siete refuerzos del firme, el acondicionamiento de cinco travesías, la construcción de dos glorietas en las ciudades de Calahorra y Arnedo, la instalación de reductores de velocidad, así como la conservación ordinaria y el pago de las medidas de gratuidad en la autopista AP-68.
Obras Públicas pretende acometer este año siete actuaciones de refuerzo del firme que tienen un presupuesto total de 5,1 millones de euros. Estos trabajos se llevarán a cabo en la LR-113, desde la LR-340 de acceso a Arenzana de Abajo hasta Nájera (643.221 €); LR-111, en el acceso a Haro (482.956 €); LR-208, de la LR-515 a la N-232 en San Asensio (813.325 €); LR-115, entre Autol y Aldeanueva de Ebro (1.046.675 €); LR-333 de Viniegra de Arriba a Viniegra de Abajo (1.073.816 €) y LR-113, desde Tabladas a la intersección con la LR-333 (250.000 €). En abril está previsto que se complete el refuerzo del firme de la LR-200, que incluye mejoras puntuales en las travesías de Leiva, Herramélluri y Cuzcurrita. La segunda anualidad de esta obra, que empezó en 2014, asciende a 874.808 euros.