La apuesta llega tras constatar que la infraestructura se ha consolidado en los últimos años
Entre las inversiones destacan la apertura de un nuevo acceso rodado al recinto, para mejorar la movilidad de los usuarios; y la actualización de la red de alumbrado, para reducir la contaminación lumínica en una zona especialmente sensible, ya que el Logis Empordà se encuentra situado en medio de la llanura ampurdanesa, ruta de aves migratorias que pasan por los Aiguamolls del Empordà. Para alcanzar este objetivo se aplicarán criterios de ahorro energético: por un lado por la incorporación de la tecnología LED que reducirá la huella de CO2 derivada del consumo eléctrico como para el ahorro en la economía de explotación del recinto.
Igualmente, con el fin de optimizar el consumo de agua de riego, se reestructurará la plantación de arbolado de alineación y las zonas verdes. Todas las nuevas plantaciones serán de especies existentes dentro del ámbito y se trasplantarán ejemplares singulares para mejorar la integración paisajística. Gracias al uso de criterios de xerojardinería, el consumo interno de agua tendrá un balance cero para las zonas verdes.
Este equipamiento, promovido y gestionado por la empresa pública catalana, Cimalsa está destinado a actividad logística y de servicios con vocación transfronteriza, ya que está localizado en el municipio de El Far del Empordà. Tiene una superficie total de 73 hectáreas, 21 de las cuales están urbanizadas en una primera fase, y está ubicado adyacente a la estación Intermodal de Vilamalla, con capacidad para gestionar mercancía ferroviaria en contenedores, frigoríficos, graneles y automóviles.
La apuesta llega tras constatar que la infraestructura se ha consolidado en los últimos años y actualmente cuenta con cuatro empresas instaladas y en pleno funcionamiento. Además, está previsto que se amplíe con la futura plataforma Intermodal del Empordà, que tendrá conexión ferroviaria de ancho ibérico y europeo.