En los últimos cuatro años, Correos se ha transformado, pasando de ser una empresa eminentemente postal, a una empresa que gestiona más de 160 millones de envíos al año
En los últimos cuatro años, Correos se ha transformado, pasando de ser una empresa eminentemente postal, a una empresa que gestiona más de 160 millones de envíos al año. Este cambio en el paradigma de la empresa ha impulsado a la compañía a adaptarse a las demandas que la sociedad ha venido requiriendo en los últimos tiempos, como la sostenibilidad, la digitalización y la internacionalización. El nuevo logo se ha diseñado desde el respeto al primer diseño realizado en 1977 por José María Cruz Novillo, creador de la mayoría de los logos más importantes de la historia de este país. Correos ha reconocido, a propuesta del presidente de la compañía, a Cruz Novillo como el séptimo Cartero Honorario.
A juicio de la patronal española de logística y transporte, UNO, no es coherente que Correos malgaste recursos en cambiar su logotipo, teniendo en cuenta que es una empresa con un déficit declarado de, al menos, 178 millones de euros. El presidente de UNO, Francisco Aranda, ha declarado en una jornada celebrada en la sede de CEOE que le parece insólito que una empresa con enormes pérdidas y una resolución por la que se declaran ayudas ilícitas por importe de 317 millones de euros, de los que están pendientes de restituir al Estado 167 millones de euros, dedique recursos a modificar su identidad corporativa. UNO es la organización empresarial de los operadores de logística y transporte, un sector que representa el 6% del PIB.
El momento de transformación a todos los niveles que vive Correos: logístico, tecnológico, de recursos humanos, e incluso de flota, ha llevado a que haya decidido presentar una nueva imagen corporativa más sencilla, abierta y ágil. Se trata de una actualización y modernización de la misma que permite la adaptación a las nuevas necesidades del mundo digital. La actualización del logo de la compañía mantiene la cornamusa y la corona, legado histórico de Correos, así como el amarillo, su color corporativo, para mantenerse reconocible. Y elimina el nombre, dando paso al isotipo en su forma más sencilla. Un símbolo internacional, universal, que es reconocido por la sociedad española y aplicable a todo tipo de soportes y documentos.