Los vehículos son monocasco reforzado con pliegues laterales y el piso está encastrado en el chasis
La K-Limit, de 6.300 kg y una caja con un espesor de 5 mm en el suelo y 4 en los laterales, es una bañera polivalente, destinada para cualquier uso, adaptable según necesidades. Posee una exigencia alta en fortaleza, con más alternativas y capacidad de carga. Mientras, la K-Light, con 5.500 kg de peso y una caja con un espesor de 4 mm en el suelo y 3,2 en los laterales, está pensada para casos más concretos. En ambos casos, están realizadas con acero, que resulta más duro y versátil que el aluminio y están adaptadas para un posible cambio de normativa de 40 a 44 toneladas.
Los vehículos son monocasco reforzado con pliegues laterales, el piso está encastrado en el chasis y el punto de gravedad se sitúa por debajo de la basculación, para que volteen lo más seguros posibles. A nivel electrónico, la suspensión neumática de tres ejes baja de golpe y se ha creado el inclinómetro, un aparato situado en la cabina del camión, que permite conocer el ángulo de inclinación de la báscula, posee aviso acústico cuando se exceden los límites. También existe un refuerzo en la parte trasera para que la carga vaya hacia el centro para mejorar la descarga.