Según Confebus, el importe de estas ayudas no es suficiente para provocar y fomentar un verdadero cambio tecnológico, destacando que, en comparación con otros países de la Unión Europea el incentivo económico dista mucho de las cuantías españolas, como en el caso de Alemania, donde desde hace años se está compensando la diferencia del sobrecoste del cambio tecnológico, o el de Portugal que desde 2014 concede ayudas de 300.000 euros, para la compra de vehículos eléctricos y de 500.000 euros para los de hidrógeno.
Además, añade que se dejan fuera tecnologías basadas en eco combustibles y en motores de combustión de última generación, como Euro 6d, disponible desde el 1 de enero de 2021, o Euro 7, y se incentivan tecnologías que aún no están disponibles para su producción masiva y, que no cuentan con la infraestructura de recarga necesaria.
Por ello, la confederación se ha encargado de que a la hora de la actuación, para las ayudas se pueda tener en cuenta dichas apreciaciones para el Sector.
Real Decreto
El Real Decreto ha manifestado los distintos beneficiarios de estas ayudas, así como los requisitos para conceder la financiación, y la realización de la concesión de ayudas directas a las Comunidades Autónomas, incluidas Ceuta y Melilla.
El objetivo de esta financiación es la transformación del parque de vehículos pesados de transporte de mercancías y de viajeros, para innovar en cuanto a la tecnología con el fin de que los vehículos empleen energías alternativas. Además, de descarbonizar la flota y mejorar la calidad del aire en las ciudades metropolitanas.
Se desarrollarán vehículos de cero y bajas emisiones, para continuar hacia la descarbonización. Ya que durante el año 2020, solo seis camiones fueron electrificados de un total de 18.812 matriculados.
Objetivos de las subvenciones
Las subvenciones que se recogen son las siguientes:
1) Achatarramiento de vehículos adscritos a una autorización de transporte y matriculados en España con anterioridad al 1 de enero de 2019. En el total de la vigencia del plan, se espera achatarrar unos 20.000 camiones y 3.000 autobuses, lo que supondrá una reducción estimada de emisiones de CO2 de 600.000 toneladas al año.
2) Adquisición de vehículos de energías alternativas. Son subvencionables los vehículos eléctricos, de hidrógeno, híbridos e híbridos enchufables y de gas (GNL o GNC), en este último caso de forma transitoria hasta el 31 de diciembre de 2023. Los vehículos deberán ser nuevos y matricularse y adquirirse tras la solicitud de la ayuda.
3) “Retrofit” o modificación de la forma de propulsión de vehículos desde combustibles de origen fósil a vehículos cero emisiones, eléctrico o de hidrógeno. También en un plazo transitorio hasta el 31 de diciembre de 2023, es potencialmente subvencionable la transformación de una motorización diésel o gasolina a 100% gas, siempre que cumplan con los últimos estándares de emisiones contaminantes para vehículos pesados.
4) Implantación de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos.
5) Adquisición de semirremolques para autopistas ferroviarias.
Ayudas e infraestructuras
Las ayudas se mantienen repartidas dependiendo la categoría y el tipo de vehículo (N2, N3, M2, M3 y sus clases), y también, dependiendo el tipo de destinatario, y ayudando sobre todo a autónomos y pequeñas y medianas empresas para la obtención de flotas cero o bajas emisiones.
En cuanto a la instalación de infraestructuras de recarga, la norma recoge que la cuantía máxima se establece para puntos de carga con potencial igual o superior a 350 kW, con 70.000 euros de ayuda fija, vinculada a la adquisición de un camión eléctrico, híbrido enchufable o de autonomía extendida.
Las ayudas serán distribuidas entre las comunidades autónomas por concurrencia simple, es decir, desde que se solicita el crédito hasta que se agota. El objetivo se estima que se reduzca en un 3% las emisiones de gases de efecto invernadero que reproduce el transporte por carretera, para conseguir de acuerdo al año 2030 la lucha contra el cambio climático y alcanzar su neutralidad en 2050.
El primer pago de las ayudas será de un total de 174 millones de euros, impartido entre las distintas comunidades y ciudades autónomas. Un plazo que se irá ampliando con los años en relación con la demanda hasta los 400 millones de euros.
Plan de Recuperación
El Real Decreto reúne los 174 millones de euros de acuerdo al Plan de Recuperación: “Zonas de bajas emisiones y transformación del transporte urbano y empresas de transporte, la línea incluye 1.500 millones en ayudas para municipios para la implantación de zonas de bajas emisiones y transformación del transporte público urbano y transferencias de 900 millones a las CCAA, Ceuta y Melilla para sus inversiones directas en digitalizar y descarbonizar la movilidad metropolitana”.
Lo que se quiere conseguir es una disminución de los gases de efecto invernadero y del ruido, visibilizando otros servicios sostenibles y activos, como la bicicleta. Además, invierte en la innovación tecnológica para conseguir una mejora en cuanto a la accesibilidad del transporte y una mayor eficiencia.
