El uso del transporte público continúa recuperándose del parón sufrido durante el año 2020. Las cifras de usuarios continúan al alza, aunque todavía se encuentran muy por debajo de los datos registrados antes del estallido de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19 hace ya más de dos años.
Según la publicación del INE, más de 392,5 millones de pasajeros utilizaron el transporte público en marzo. Esto supone un aumento del 41,8% respecto al mismo mes de 2021, pero un 13,5% menos que el mismo periodo en 2019 (año anterior al estallido de la pandemia).
Crisis sanitaria
La pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) supuso la paralización de la mayoría de los sectores productivos y el confinamiento de la población española. Ante esta situación, la demanda de transporte público cayó en picado durante los meses de mayor impacto del virus.
Filtrando por sectores, el transporte urbano cayó un 15,4% con una perdida de 25 millones de viajeros, el cercanías un 5% con una pérdida de 2 millones, la media distancia un 16,2% con una pérdida de 2,8 millones y la larga distancia un 28,6% con una pérdida de 355.000 viajeros. Además, el de tipo discrecional también se redujo en un 34%, con una pérdida de alrededor de 6 millones.
La única variante en el transporte que sale reforzada en la comparación ha sido la demanda del transporte especial, que aumento en más de un millón de viajeros (1%). Superó los 34,8 millones de usuarios, con un aumento del 11,8% del transporte escolar y un 4,7% del transporte laboral.
