Desde la Febt, se ha valorado de forma satisfactoria la decisión de la Audiencia Nacional. El fallo, de 5 de mayo del presente año, deja claro que la Resolución de la CNMC se equivocó al declarar la existencia de un cártel sin tener en cuenta la realidad insular de Baleares. La insularidad impide que las empresas de transporte de las diferentes islas compitan entre sí. Como recoge la sentencia, cada isla es mercado geográfico distinto. No existe, por el contrario, un mercado geográfico autonómico en el que compitan las empresas que operan en las distintas islas. Esto hace imposible que empresas presentes en distintas islas del archipiélago balear formaran parte de un cártel para repartirse un (inexistente) mercado balear de transporte escolar.
Asimismo, como explica la sentencia, el origen del expediente se encuentra en la denuncia de la empresa de transporte Autocares ALCAS (también conocida como Autocares ALBORS). El 23 de diciembre de 2013, la Dirección de la Competencia de la CNMC recibió, de esta empresa, una solicitud de exención o, en su caso, de reducción de pago de la posible multa que pudiera imponerse por la comisión de una presunta infracción consistente en la existencia de un cártel en el sector del transporte de viajeros por carretera en las Illes Balears, en especial, en el segmento del transporte escolar de centros de la red pública de enseñanza. Por otra parte, el Gerente de la Febt, Salvador Servera, ha anunciado que la sanción por la recomendación de precios de referencia en el transporte discrecional, a la que también se refiere la AN, será recurrida al entender que la actuación de la patronal del transporte se ha ajustado y se ajusta siempre a lo establecido por la normativa vigente.
