Lara ya realizó una primera visita a la localidad junto a técnicos de su departamento hace unos días para conocer el solar que albergará la futura terminal de autobuses.
Según ambas partes, el principal escollo al que se enfrenta la obra son los accesos desde ese punto, junto al polígono, al núcleo urbano. Los responsables municipales trasladaron al presidente del Consorcio una propuesta: la posibilidad de que la carretera nacional vuelva a su nivel a la altura de la entrada principal de la Villa y construir ahí una gran rotonda que dé suficiente fluidez al tráfico rodado y peatonal.
Desde el consorcio aseguran que se van a seguir todos los trámites para no parar el proyecto, con la intención de proceder a adjudicarlo a la misma empresa cordobesa que ya realizara, entre otras, la estación de autobuses de Granada, considerada de gran funcionalidad.
El Consistorio, por su parte, insiste en la necesidad de que el recinto cuente con diez andenes, además de los servicios de cafetería, quioscos y todos aquellos con los que cuenta cualquier instalación moderna. El montante del proyecto, que financia la Junta de Andalucía, permite al consorcio la adjudicación directa del mismo, según ha explicado el alcalde, quien afirma que ello agilizará aún más los trámites. "Si calculamos dos meses hasta la adjudicación y seis para la redacción del proyecto, podremos hablar que para dentro de dos años la estación estará operativa", según Jesús Avelino Menéndez.
