La huelga que se convocó el pasado mes de noviembre en el sector del transporte en Italia se amplia hasta el viernes 13 de noviembre, por decisión de algunos de los grupos de trabajadores convocantes. El motivo inicial del paro nacional fue denunciar la situación debilitada del sector en este país a causa de la crisis económica, así como negociar con el gobierno italiano la aplicación de un paquete de medidas que ayudaran a levantar el sector.
La huelga sigue pese al acuerdo
Las negociaciones llegaron a buen puerto y el pasado 28 de noviembre El Ministerio de Transportes e Infraestructuras firmó con las organizaciones de profesionales del transporte un Protocolo de Intenciones, en el que la Administración italiana se comprometía a satisfacer algunas de las reivindicaciones presentadas. En concreto, este Protocolo recoge 18 puntos de mutuo acuerdo entre trabajadores y Gobierno. Entre ellos, se descarta la rebaja de los costes salariales; se establecerá un mecanismo de control sobre el cumplimiento de los plazos de pago establecida en 30 días; se contempla revisar la regulación vigente sobre la circulación para hacer más competitivo al sector; se acepta la posible recuperación de parte del impuesto sobre los hidrocarburos, así como una revisión de las reglas de cabotaje para luchar contra el dumping social.
Pese a la firma de este Protocolo, algunas organizaciones convocantes han decidido mantener la convocatoria de huelga hasta el próximo día 13 de diciembre. Por ello se esperan nuevas dificultades en las carreteras italianas.
