Con el proyecto 3iBS el sector del transporte en autobús de la Unión Europea cuenta ya con un plan de acción para mejorar este medio de transporte en Europa. Un medio muy demandado como demuestran las cifra y es que los viajes en autobús representan 30 millones al año en la UE, alrededor de la mitad de los viajes realizados en transporte público.
En el plan de acción 3iBS se pide a las instituciones europeas incluir el transporte público en todas las estrategias europeas de reducción de CO², lo que requiere que las ciudades establezcan unos objetivos para aumentar la cuota de mercado del transporte público antes del año 2025. Desde la Comisión opinan que al igual que se realizan otras campañas a nivel europeo en cuanto al automóvil o el ferrocarril, también a esta escala hay que prestar especial atención al autobús como una herramienta limpia y rentable para las crecientes necesidades de movilidad de las ciudades europeas y las regiones.
El sector exige mecanismos financieros para acelerar la modernización de la flota, lo que se traduce en una forma instantánea de reducir las emisiones de CO², ya que casi el 50% de los autobuses en Europa son Euro III o más. En total, el 80% de las flotas siguen funcionando con motores diesel que son cada vez más limpios, mientras que las tecnologías de propulsión están cada vez más diversificada. El proyecto también requiere de recursos adicionales para pruebas con otros combustibles alternativos.
"La mejora de la oferta de transporte público requiere de un excelente servicio de autobuses para desencadenar un cambio modal hacia el transporte público y los modos de movilidad combinados", dijo Umberto Guida, Director de Proyectos de la UE en la UITP. "Se necesitan proyectos financiados por la UE y los instrumentos financieros del BEI para apoyar aún más a nuestras ciudades en la mejora de sus sistemas de bus".
