En un escenario de transformación del transporte público y aumento de la demanda de movilidad colectiva sostenible, las matriculaciones de autobuses, autocares y microbuses continúan en positivo. Septiembre cerró con 827 nuevas unidades registradas, lo que representa un incremento del 4,9% respecto al mismo mes del año anterior, según datos publicados este 1 de octubre.
Aunque el sector todavía arrastra una caída del 7,7% en el acumulado del año, la evolución reciente empieza a mostrar signos de estabilización, impulsada por una mayor renovación de flotas y el efecto de los planes públicos de apoyo a la movilidad urbana y metropolitana.
A lo largo de 2025, el conjunto de vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses ha sumado un total de 24.227 unidades matriculadas, una cifra que, si bien está por debajo de la registrada en 2024, refleja un progreso constante en los últimos meses.
El buen comportamiento del mes de septiembre se suma al de otros segmentos, como los vehículos industriales (+22,8%), y refuerza la tendencia de recuperación escalonada en el sector del transporte profesional.
Organizaciones del sector como Anfac, Faconauto o Ganvam coinciden en que el mercado necesita estímulos más constantes y directos, sobre todo en lo relacionado con los vehículos colectivos, que son clave en la transición hacia una movilidad más limpia.
Tania Puche, portavoz de Ganvam, fue clara en su valoración:“El mercado mantiene su tono positivo, pero es urgente destinar fondos a los planes de estímulo para evitar el estancamiento en el último trimestre del año.”
Por su parte, Raúl Morales (Faconauto) advirtió que sin los planes de renovación y electrificación, especialmente los vinculados al programa MOVES, muchos operadores no podrían permitirse actualizar sus flotas:“La falta de continuidad presupuestaria en algunas regiones pone en riesgo el progreso logrado en movilidad sostenible.”
En definitiva, aunque el camino hacia una recuperación sólida no está exento de retos, los datos de septiembre muestran que el sector del autobús sigue avanzando, con señales claras de reactivación. Un avance que, si va acompañado del respaldo institucional adecuado, puede consolidarse como un pilar en la nueva movilidad colectiva del país.