Se trata de una caída de pasajeros del 97%, lo que genera unas necesidades adicionales de financiación
Vázquez Mourelle explicó que esta compensación solicitada al Ministerio de Transportes es necesaria para frenar el impacto negativo derivado del estado de alarma y de la caída de usuarios en los servicios de transporte público interurbano.
Precisó que se trata de una caída de pasajeros del 97%, lo que genera unas necesidades adicionales de financiación para las concesiones actuales, afectadas por el estado de alarma.
También hizo hincapié en que es preciso garantizar un transporte seguro, por lo que ayer se le reiteró al Ejecutivo central a necesidad de un protocolo único de limpieza y higiene para vehículos y trabajadores.
Resaltó que la Xunta sigue trabajando para blindar la sostenibilidad del transporte público. En este sentido, el Gobierno gallego va a pagar un millón de euros de anticipos por los servicios de transporte interurbano que se están prestando con las concesiones actuales, minimizando las consecuencias de las restricciones impuestas a la movilidad por el estado de alarma.
Además adelantó que para facilitar la actividad del sector, la Xunta va a emitir una certificación digital mientras no se pueda expedir físicamente el CAP, el certificado de aptitud profesional que acredita a los conductores -de viajeros y de mercancías-, en el ejercicio de su actividad.
El Ejecutivo autonómico continúa sumando esfuerzos a favor del transporte público, pues en un territorio tan disperso como el gallego es fundamental para el funcionamiento de la sociedad y para que los ciudadanos accedan a los servicios públicos.