El mes de agosto de 2025 dejó cifras mixtas para el sector del transporte de pasajeros en España. Según el último informe del IEA con datos de la DGT, las matriculaciones de autobuses, autocares y microbuses alcanzaron las 125 unidades, lo que supone un descenso del 18,3% respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, dentro del segmento, los microbuses protagonizaron un fuerte crecimiento, mientras que los autobuses y autocares sufrieron un retroceso considerable.
En el acumulado de enero a agosto, las matriculaciones en este segmento alcanzan las 2.473 unidades, lo que representa una caída del 10% respecto al mismo periodo de 2024.
Caída acumulada del 10% en 2025
El segmento más afectado fue el de autobuses y autocares, que en agosto registró solo 86 matriculaciones, un 34,8% menos que en 2024. En el acumulado anual, la cifra se sitúa en 1.780 unidades, con una bajada del 19,6%.
Entre los fabricantes, marcas como Mercedes (-36,4%), Irizar (-100%) o Temsa (-100%) destacaron por su descenso, mientras que otros como Volvo (+400%), Setra (+50%) o Unvi (+240%) lograron cerrar el mes en positivo. Pese a estos incrementos puntuales, la tendencia general sigue siendo claramente a la baja.
En contraste, el mercado de microbuses (vehículos de más de 9 plazas) mostró un notable dinamismo en agosto, con 39 matriculaciones, lo que supone un incremento del 85,7% respecto al mismo mes del año pasado. En el acumulado anual, se alcanzan ya 693 unidades, un 30% más que en 2024.
Marcas como Mercedes (+266,7%), Ford (+200%) y Renault tuvieron un papel destacado en este crecimiento, confirmando el buen momento del segmento, especialmente en ámbitos como el turismo y el transporte discrecional.
En conjunto, los datos reflejan un escenario desigual: mientras los autobuses y autocares grandes siguen perdiendo terreno, los microbuses consolidan su papel como alternativa flexible y eficiente, en un contexto donde la demanda de transporte de pasajeros se está reconfigurando tras la pandemia y frente a los cambios en los hábitos de movilidad.
Con una caída acumulada del 10% en 2025, el sector afronta el reto de recuperar el dinamismo y adaptarse a un escenario en el que las flotas pequeñas parecen ganar espacio frente a los grandes autocares.