El Consejo de Capitalidad de Palma ya había acordado la aportación, por parte del Gobierno, de 3.750.000 euros para la compra de los buses que la EMT licitará y comprará durante el primer semestre de 2022.
La planta de hidrógeno de Lloseta se tiene previsto que se ponga en funcionamiento el último trimestre de 2021, poco antes de la llegada de los vehículos en Palma. De hecho, estos buses consumirán el 17% de la producción de la planta. Concretamente, el consumo estimado es de 50 toneladas anuales y la planta producirá 300 toneladas.
El hidrógeno sólo emite vapor de agua y que es obtenido con energías 100% limpias
Yllanes ha destacado que con esta iniciativa “el Gobierno formaliza su apoyo a una energía limpia, como es el hidrógeno verde, que se producirá en Lloseta y que cuenta con el apoyo de la Unión Europea”.
Por su parte, José Hila ha destacado que “seremos la tercera ciudad del país después de Madrid y Barcelona que tendrá buses de hidrógeno, un combustible que es 100% limpio. El acuerdo que alcanzamos con la Consejería es fruto de la colaboración entre administraciones, como EMT es importante estar presente en un proyecto estratégico y pionero como este”.
Financiación conjunta
Por otra parte, Juan Pedro Yllanes ha comprometido a que el Gobierno se haga cargo, en el futuro, del sobrecoste que pueda generar tener un bus de hidrógeno respecto a los de gas natural, como el mantenimiento o el gasto de combustible. Por este motivo, se está trabajando en un convenio entre ambas administraciones para acabar de definir la aportación total del Gobierno.
“A partir de aquí hay que seguir apostando por la movilidad limpia, sea con hidrógeno o eléctrica, con el fin de reducir las emisiones contaminantes”, aseguró Yllanes. Y ha añadido que “el proyecto de la planta de hidrógeno de Lloseta y de todo lo que supone está fundamentado en la reindustrialización basada en las energías renovables que aporta conocimiento, investigación e innovación”.
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