El caso es que se acerca la temporada alta en algunos destinos turísticos de nuestro país, como las Islas Baleares, y existe un claro riesgo de que no pueda ser atendida toda la demanda de viajeros.
Sus máximos dirigentes asociativos llevan meses denunciando esta situación, sin que la solución haya aparecido todavía. En los últimos días, el presidente de la Agrupación Empresarial de Servicio Discrecional de Mercancías, Ezequiel Horrach, ha cifrado, en declaraciones recogidas por 'Última Hora', en un mínimo de 300 los conductores que se necesitan con urgencia ante ese pico de actividad que se espera a partir de la reciente Semana Santa.
A esto se suma Rafael Roig, presidente de FEBT, que considera que los operadores de viajeros tendrían que encontrar un centenar de conductores lo antes posible, algo que, sin duda, no es tan fácil.
Alsa, manos a la obra
A la espera de que la parte pública articule las soluciones, que tardarán lo suyo en dar fruto, la iniciativa privada se ha puesto manos a la obra. Alsa presentó hace unos días dos vehículos eléctricos (de Karsan, por cierto) que ya están trabajando en Ibiza. Víctor López, su director general, también puso el acento en la falta de personal al volante pero, en este caso, la compañía ha propuesto una alternativa.
Así, ha publicado una oferta de empleo para 22 personas en Ibiza, con el atractivo de que ayudará a la hora de encontrar vivienda e, incluso, como se refleja en el Diario de Ibiza, colaboraría con parte de los costes de la misma. Y es que, en Ibiza, la insularidad y la falta de oferta de vivienda acentúan la de conductores.
Un paso al frente para encontrar respuestas inmediatas a una cuestión que, cada día, es más preocupante en determinadas zonas de nuestra geografía.
