www.nexotrans.com

‘Sí, manejamos esto del tacógrafo. Ahora entramos en una segunda fase: La gestión de flotas’ (II)

Continental VDO explica al detalle las mejoras introducidas en los dispositivos para evitar manipulaciones

martes 06 de julio de 2010, 01:00h

Continuando con la información publicada ayer sobre el Workshop de Continental, celebrado en Alemania los pasados 29 y 30 de junio, luego de las presentaciones generales las delegaciones de cada país se reunieron con los encargados locales para analizar una serie de aspectos relacionados con el tacógrafo que fueran de particular interés. El grupo español se centró en el tema de las manipulaciones.

Eduardo González, director general de Continental Automotive Spain, explicó que los dispositivos fabricados por la compañía son unidades muy impermeables a los intentos de manipulación, con un nivel muy alto de  encriptación y niveles de seguridad "mayores que los de un cajero bancario". "Los problemas —continuó— están en que la unidad intravehicular necesita tomar la información desde el propio vehículo, por lo que se pueden dar intentos de manipulación en el proceso, entre el vehículo y la información recibida". Ahora, el tema de la seguridad está perfectamente definido en el Reglamento 1266/2009, que establece los elementos que hay que mejorar respecto a la introducción del tacógrafo.

Así, se han sumado medidas para evitar los intentos de manipulación mediante la generación de campos magnéticos que varíen los niveles de tensión introducidos por el sensor, si bien para ello ha sido necesario un largo proceso de acuerdo entre los distintos países. Proceso que toma tiempo y cuesta dinero, según explicaron Eduardo González y Alberto Pérez, director de Marketing, Comunicación y Business Development, pero que verá la luz el 2 de octubre de 2012, fecha límite fijada por Bruselas para el establecimiento de una serie de medidas 'antimanipulación': nuevos sensores de velocidad, pruebas de manipulación de las revisiones periódicos en el taller, posibilidad de incorporar un segundo sensor de movimiento, especificaciones genéricas sobre el papel de las impresoras, etc. Por otra parte, en octubre de 2011 entran en vigor una serie de aspectos relacionados con la simplificación y racionalización del manejo del tacógrafo.

‘Homologación’ por marcas y modelos

Pero todo esto necesita, a su vez, del acuerdo con los fabricantes de vehículos. "El tacógrafo ya no es un aparato independiente del vehículo, forma parte de su arquitectura electrónica", reflexionó González, agregando que "así, cuando se intenta manipular en sensor, hay muchos elementos de la electrónica del vehículo que dejan de funcionar".

Nos encontramos entonces con una dificultad añadida para los fabricantes de tacógrafos, ya que no sólo deben mantenerse al día respecto a lo que marque la legislación y hacerse sitio entre el lobby de los fabricantes de vehículos en Bruselas, además esta integración dentro de la electrónica varía según la marca de cada vehículo (con excepción de la parte homologada). "Es como si cada fabricante, a su vez, homologa a los fabricantes de tacógrafos, es decir, acepta su producto", explicaron González y Pérez. "Y no solo por marcas, también por modelos", finalizaron.