A pesar de que en un primer momento la intención de la UTE era la de no entregar estas unidades, el pasado viernes tuvo lugar una reunión del Consejo de Madrid Vision, en la que se adoptó la decisión de sí entregarlos, "dado que se nos estaba responsabilizando a nosotros de ser los culpables de que el servicio no se estuviera prestando", según comenta el director general de Madrid Vision, Heriberto Verdés, a NEXOBUS.com. No obstante, "nos reservamos el derecho de seguir reclamando lo que consideramos un justo precio por estas unidades", continúa Verdés, quien no quiso aportar cifras concretas sobre el montante de la operación, aunque sí desmintió que éste sea de 4,5 millones de euros, como se ha publicado.
"De hecho", sostiene el director general, "hemos valorado los vehículos a la baja sobre el precio de mercado, basándonos en las operaciones de venta que hemos cerrado durante el último año. Incluso, tenemos ofertas nacionales por tres o cuatro unidades, y por algunas más desde el extranjero".
Nuevo concurso
Al respecto de las posibilidades de que los miembros de la UTE se presenten al nuevo concurso, Verdés no encuentra razones para que esto no suceda, lo cual "sería incluso lógico, dado que el servicio se ha prestado con calidad durante todo este tiempo. Lo que yo no puedo valorar es de qué manera se presentarán, de hacerlo finalmente".
Por último, la cuestión laboral, ya que los trabajadores de Madrid Vision se encuentran en suspensión temporal de contratos, a la espera de la adjudicación de la concesión en un futuro próximo, que parece que podría estar fijado en unos seis meses. Durante dicho periodo, será la EMT quien preste el servicio, manteniendo sus dos líneas, según ha decidido el Area de Economía del Ayuntamiento de Madrid, aunque no se conocen todavía los detalles de cómo lo hará.
Aunque la intención de todos es que se reanude el servicio de manera inmediata, se apuntan algunas cuestiones por resolver, como los canales de venta de billetes o la contratación de personal (conductores y, sobre todo, azafatas). La aplicación informática para la venta de los títulos y para la elaboración de los correspondientes informes es propiedad de la UTE, y los dispositivos embarcados que tenían en la flota han sido retirados antes de su entrega al Ayuntamiento.
