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Los sindicatos convocan una huelga indefinida en el transporte asturiano a partir del 4 de junio

jueves 17 de mayo de 2012, 01:00h

Los sindicatos UGT y CC.OO. han convocado una huelga indefinida para el sector del transporte por carretera (tanto de mercancías como de viajeros) en Asturias tras no conseguir llegar a un acuerdo con las patronales regionales del sector para renovar el convenio colectivo, que caducó el pasado 31 de diciembre.

Las diferencias con la patronal por los salarios y la jornada para 8.000 trabajadores amenazan con bloquear el tránsito de mercancías y viajeros, según ha publicado el diario La Nueva España. El paro comenzará a las doce de la noche del próximo 4 de junio. Los sindicatos no están de acuerdo con la subida salarial que plantean los empresarios ni con la modificación de los horarios laborales que, aseguran, se pretenden aplicar.

Los representantes de las centrales celebraron recientemente una asamblea para exponer a los trabajadores la situación de las negociaciones con los empresarios (representados en las patronales Car, Astra, Asvipymet, Cesintra y Asetra). En la reunión, en la que participaron más de 200 trabajadores, se aprobó por unanimidad la convocatoria de la huelga general e indefinida para el Sector. UGT y CC.OO. acusan a las patronales del sector de no querer llegar a un acuerdo para renovar el convenio colectivo, que afecta a unos 8.000 trabajadores asturianos.

En un principio, los sindicatos habían reclamado a la patronal una subida salarial del 1% más el IPC para este año. Aunque, señalan, que aceptarían un incremento del 0,6% para este año y del 0,5% para el que viene (sin subida ligada a la inflación) a cambio de que no se toquen las jornadas laborales tal y como, aseguran, pretenden llevar a cabo los empresarios.  Según señalan los sindicalistas, la patronal quiere eliminar las actuales jornadas laborales del sector (de 40 horas semanales) para imponer una jornada irregular en la que los empresarios tengan una mayor flexibilidad para poder distribuir los horarios en función de la carga de trabajo. Las centrales acusan a la patronal de dilatar las negociaciones para evitar que se firme el convenio.