El acuerdo de intenciones alcanzado establece las líneas generales para la continuidad de la empresa, ha informado el Gobierno de Navarra. Para que la transacción se haga efectiva, deberá estar acordado el plan de restructuración de la plantilla, asegura el documento, ya que de no alcanzar este acuerdo, las partes consideran que el plan no es viable.
El Gobierno de Navarra, a través de Sodena, se hará cargo de la deuda que ya estaba avalada por esta sociedad, cerca de 15 millones de euros. Sobre el resto de la deuda, se contempla su negociación en el plan de viabilidad por la nueva propiedad de la empresa, que podrá hacerse cargo de ella. Además, la nueva propiedad hará aportaciones de 1 millón de euros.
Por otro lado, también se contempla por parte del Gobierno una serie de apoyos económicos que serán calendarizados y que como máximo podrá alcanzar la cantidad de 4,5 millones de euros. La vicepresidenta primera ha explicado que en las próximas semanas se irán concretando los detalles del acuerdo, ya que se inicia ahora un proceso para la materialización de esta fórmula mixta.
Asimismo, la consejera Goicoechea ha agradecido el esfuerzo y la colaboración encontrada en este complejo proceso por parte de la dirección de la empresa y de MCA-UGT. “Su esfuerzo es muy notable y creo que puede ser ejemplo para muchas otras empresas que están pasando dificultades. Ejemplo de unión y colaboración, ejemplo de implicación y compromiso y ejemplo de apuesta por un proyecto viable”, ha afirmado.
Empresa importante para la Barranca
La consejera ha explicado que el Gobierno ha prestado "un apoyo económico muy importante a lo largo de los últimos años", por dos razones: la empresa tiene un "producto muy bueno y viable" y se trata de una sociedad "importante" para la riqueza y el empleo de la Barranca, tanto por los empleos directos e indirectos que genera como por ubicarse en una zona que está siendo "especialmente castigada por el desempleo".
Por otro lado, la vicepresidenta primera ha recordado que la participación del Gobierno de Navarra como propietario "siempre ha tenido un carácter transitorio, de no permanencia". En el último año ha trabajado en distintas alternativas, como la búsqueda de posibles socios industriales, que no ha fructificado "por el estancamiento del mercado"; la posibilidad de constituir una cooperativa de trabajadores, "que tampoco ha recibido un apoyo positivo"; y, finalmente, que la empresa sea adquirida por los directivos y trabajadores en una fórmula mixta de participación, posibilidad que ha desembocado en el principio de acuerdo alcanzado y que requiere de un proceso de reestructuración de la plantilla.
Por parte de la dirección, José Ignacio Murillo, ha recalcado que Sunsundegui posee, por un lado, un producto de alta calidad reconocido por el mercado y con clientes dispuestos a comprar, y se enfrenta, por otro, a retos para salir adelante. "Este principio de acuerdo es un primer paso pero no la solución", ha señalado, para abogar por la implicación de todos los empleados y la internacionalización.
Finalmente, Lorenzo Ríos, de UGT, ha destacado que el principio de acuerdo se adopta en un contexto "de emergencia industrial y social en la Barranca" y ha indicado que el comité de empresa debe afrontar el ajuste de plantilla para "evitar males mayores" y como medio para favorecer la viabilidad de la factoría. Según el plan de viabilidad, la reestructuración afectaría a 65 personas, 15 menos de las contempladas inicialmente. De ellas, cuatro tienen contrato temporal y 12 han avanzado su voluntad de dejar la compañía. Sunsundegui mantendría 140 empleos, aproximadamente, según ha informado Murillo.
