Las horas perdidas por huelgas aumentaron, según el citado informe de la CEOE, un 94,04% hasta marzo. La conflictividad estrictamente laboral -se excluyen las huelgas de funcionarios o trabajadores de servicios de carácter público y las que respondieron a motivaciones de índole extralaboral- refleja que en el primer trimestre se registraron 172 paros (el 6,52% menos).
Esas protestas afectaron a 117.958 trabajadores, de los que se vieron implicados 34.375 (el 23% más) y en las que se perdieron 3.899.530 horas (el 14,82% más). En marzo se produjeron un total de 80 huelgas, por las que se perdieron 3.663.112 horas de trabajo, el 114% más que en el mismo mes de 2007. La conflictividad estrictamente laboral en marzo incidió especialmente en la provincia de Madrid (con 20 paros), seguida de Barcelona (8), Alava, Asturias y Navarra (con 5), y Guipúzcoa, Huelva y Pontevedra (con 3). Si se analiza por trabajadores implicados, Barcelona se situó a la cabeza (con 4.731 huelguistas), le siguieron Madrid (4.428), Navarra (1.657) y Asturias (961).
Los sectores más afectados por las huelgas durante ese mes fueron metal, transportes y comunicaciones, otras industrias manufactureras, extracción y transformación de minerales no energéticos y productos derivados-industrias químicas, construcción y otros servicios.
De las ochenta huelgas, veinte fueron para presionar sobre las negociaciones de convenio o protestar contra la ruptura del diálogo. Otros quince conflictos fueron para reclamar aumentos salariales, seis para obtener salarios atrasados y ocho para protestar contra la tramitación de expedientes de regulación de empleo.
