Preguntado por estas cuestiones, Andreu Puñet, director general de la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), expone a NEXOTRANS.com que “el sector del refino y la distribución de productos petrolíferos fue declarado servicio esencial, por lo que desde la declaración del Estado de Alarma se ha mantenido operativo, a pesar de las excepcionales circunstancias que estamos viviendo”.
A su juicio, “los precios son más estables en los surtidores, pero ha habido una bajada importantísima. Hay que tener en cuenta que más de la mitad del precio son impuestos, a lo que hay añadir todos los costes de logística y distribución. Al final, la parte que se ve afectada por la caída del precio del petróleo es relativamente pequeña”, añadiendo que “la diferencia entre el precio antes de impuestos y la cotización internacional (PAI-Ci) es lo que se conoce como margen bruto. Dicho margen bruto tiene que hacer frente a los siguientes costes: tasa de la CNMC, coste del punto de venta y margen del minorista, costes de logística, costes de mantener las existencias mínimas de seguridad y el margen mayorista. Este último, además, deberá soportar los costes de comercialización, la amortización de las inversiones y los costes de capital, por lo que finalmente quedaría el beneficio bruto del negocio al que habría que descontar los impuestos”.
'La parte que se ve afectada por la caída del precio del petróleo es relativamente pequeña'
Puñet continúa indicando que “estos costes fijos no se han visto reducidos a pesar de la caída del precio del crudo, por lo que hay que soportar estos mismos costes con una demanda que, como decía, ha caído hasta un 80%”.
A pesar de ello, “desde que se decretó el Estado de Alarma, entre el 96-98 % de las estaciones de servicio de las compañías asociadas a AOP se han mantienen abiertas, y las nueve refinerías en territorio nacional se han mantenido en operación para garantizar el suministro de combustibles durante el estado de emergencia, en especial a los clientes prioritarios: hospitales, fuerzas y cuerpos de seguridad, fuerzas armadas y aeropuertos, entre otros. Somos muy conscientes de nuestro papel en esta crisis: ser garantes de la movilidad, del suministro de combustibles que permitan que tanto las personas y los productos, como alimentos y medicinas, sigan llegando a su destino. Y este papel, unido a las caídas de las ventas, que han llegado en algunos casos al 80 %, está suponiendo un gran esfuerzo para las compañías del sector”, matiza el director general.
Ahora quedaría conocer la evolución de los precios del petróleo, algo “casi imposible en situaciones normales, por lo que en esta situación extraordinaria es incluso más complicado”, según el director general de AOP. “El desencuentro entre la OPEP y Rusia provocó grandes caídas del precio del crudo, y aunque han llegado a un acuerdo para recortar la producción en casi 10 millones de barriles al día, que es el recorte más grande que se ha aprobado nunca, el precio no se ha recuperado. Habrá que ver cómo se comporta en las próximas semanas y eso dependerá mucho de cómo evolucione la crisis sanitaria y cómo vayamos regresando a la actividad normal”.
Desescalada
Para la desescalada, desde AOP “hemos presentado esta semana al Gobierno y a los grupos políticos nuestras propuestas para estimular la recuperación económica. Queremos que el sector del refino contribuya, como ha contribuido siempre, al crecimiento de la economía y al bienestar de la sociedad. Ahora se trata de recuperar plenamente la actividad y contribuir a volver a poner en marcha la economía, y nuestra propuesta es hacerlo a través de la Estrategia de Evolución hacia los Ecocombustibles que presentamos el pasado octubre, un plan de transición energética para el sector del refino. Para ejecutarlo, necesitamos el apoyo de las Administraciones, certidumbre regulatoria, desarrollo normativo y estímulo de la inversión en I+D+i. Entre las medidas que planteamos se incluyen acciones de corto plazo, como un plan Renove para sustituir los vehículos más contaminantes por otros nuevos y más eficientes”, concluye Puñet.