El comunicado emitido por Industria recuerda que el Plan de Competitividad es uno de los pilares del Plan Integral de Automoción (PIA), que a su vez forma parte del Plan Español para el Estímulo de la Economía y el Empleo (Plan E), y tiene como objetivo fomentar las inversiones en procesos industriales para crear productos de mayor valor añadido, más sostenibles y más seguros. El plazo para presentar los proyectos se cerró el pasado día 13 de febrero y el resultado se hará público por el Ministerio a lo largo del mes de marzo.
De los 800 millones de dotación del Plan de Competitividad, 110 millones se destinarán a la financiación directa de inversiones relacionadas con programas de formación, ingeniería y desarrollo de nuevos productos y sistemas y los 690 millones restantes se reservarán para conceder
préstamos para inversiones en nuevos productos, procesos de producción que mejoren la protección del medio ambiente, uso eficiente de la energía e inversiones que impliquen una mejora de la sostenibilidad y competitividad de las empresas.
Desde el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio inciden en que "el sector de la automoción es estratégico para la economía española por su elevado peso en la industria y el empleo, su efecto arrastre sobre otros ámbitos y su contribución a las exportaciones. Con iniciativas como el Plan de Competitividad y el PIA el Gobierno se pretende canalizar una serie de medidas a corto, medio y largo plazo dirigidas a preservar el tejido productivo del sector y hacerlo más competitivo".
Se trata, según el departamento capitaneado por Sebastián, de liberar recursos a favor de las empresas, ampliando sus posibilidades de financiación y facilitando su acceso a préstamos favorables para dinamizar los mercados y, de esta forma, ayudar a una rápida recuperación económica.
Condiciones de los préstamos
Los préstamos del Plan de Competitividad del Sector de Automoción se concederán a un interés 0, con cinco años de carencia y con un plazo máximo de amortización de 15 años. A las ayudas puede optar cualquier empresa industrial cuya facturación, al menos en un 40%, esté destinada al sector de la automoción. Se concederán con el método de concurrencia competitiva, es decir, a las mejores solicitudes presentadas.