La compañía seguirá operando con normalidad y se adaptará a la legislación vigente, acatando las pautas marcadas en el nuevo decreto ley
Desde Stuart consideramos que la CEOE ha fallado en su función representativa dentro de la mesa del diálogo y lamentamos profundamente su falta de apoyo hacia las plataformas, provocando que finalmente no se haya adoptado ninguna de las propuestas del sector del reparto de comida a domicilio.
En Stuart vemos con mucha preocupación el futuro del sector y el efecto negativo que puede tener una laboralización forzosa tanto para nuestros clientes, como para los mensajeros colaboradores. Esta decisión va a debilitar ineludiblemente a el pequeño y mediano comercio, los principales clientes de Stuart en España, pudiéndoles causar un daño definitivo tras las restricciones que están viviendo a causa de la pandemia mundial y poniendo en peligro un sector que aporta 700M al PIB nacional.
La transformación digital de las Pymes y la restauración ha sido el objetivo principal para la compañía y por esta razón no compartimos la decisión de ir en contra de la corriente europea -con Francia como mayor ejemplo- donde sí se está legislando a favor de la economía digital y donde se están incluyendo mayores protecciones para los repartidores autónomos.
El compromiso de Stuart con España ha sido total desde sus inicios, cuando fue fundada a caballo entre París y Barcelona y donde está localizado nuestro hub tecnológico. Desde la compañía queremos remarcar que este compromiso sigue vigente a pesar de la incertidumbre que sobrevuela el futuro del sector.
La compañía seguirá operando con normalidad y se adaptará a la legislación vigente, acatando las pautas marcadas en el nuevo decreto ley.