Aquel año, Correos consiguió bajar los accidentes laborales un 22%, continuando en 2011 con otra disminución del 22% en la siniestralidad laboral de su plantilla, formada actualmente por más de 57.000 empleados.
Además de esta reducción generalizada, durante el pasado año, las cifras han bajado en todos los tipos de accidente, siendo especialmente relevante la reducción de los accidentes graves en un 44,4% y la de los accidentes leves, los más frecuentes, en un 22,18%, "lo que a su vez ha conllevado la correspondiente disminución del número de jornadas perdidas", según han explicado los responsables de la empresa.
Este descenso de la siniestralidad laboral, que ha contribuido a la reducción de prácticamente un punto en el índice de absentismo en la empresa postal, según la compañía, "es el resultado de las iniciativas desarrolladas por Correos para proteger la salud de sus empleados y extender de forma transversal en toda la compañía la cultura de la prevención de riesgos laborales".
Servicio de Prevención
Correos pone en marcha sus políticas preventivas a través de su Servicio de Prevención Propio, "uno de los más grandes de España, adecuado al tamaño y la dispersión geográfica de su plantilla". Este servicio está integrado por más de 105 personas que incluyen a la red territorial de técnicos especializados y al personal de las Unidades Básicas de Salud, actual evolución de los tradicionales servicios médicos de empresa.
La política preventiva de Correos está basada, fundamentalmente, en "la integración y gestión interna con la que ha impulsado medidas como las revisiones de las evaluaciones de riesgos, la planificación de la acción preventiva, las campañas de vigilancia de la salud y los nuevos modelos de formación en prevención, dirigidos a todos los niveles de la organización", según han detallado desde la empresa postal.