De acuerdo con Heidi Schutte, vicepresidenta de marketing y mentas de Allison Transmission en América, “esta nueva tecnología reduce aún más el consumo de combustible en todos los segmentos de los duros ciclos de un vehículo. FuelSense 2.0 ofrece mayor flexibilidad de especificación y supone la mejor relación calidad-precio para nuestros clientes”.
Su predecesor, que fue presentado en 2014, permitía ya mejoras ostensibles en el ahorro de combustible. Gracias a las mejoras de software patentadas, la nueva tecnología FuelSense 2.0 usa el cambio DynActive para ofrecer una combinación con infinitas variaciones de puntos de cambio de marcha.
FuelSense 2.0 emplea un algoritmo de aprendizaje para lograr de forma permanente el balance perfecto entre ahorro de combustible y rendimiento, lo que ofrece la máxima relación calidad-precio para aplicaciones con grandes necesidades de arranque-parada. Es perfecto para autobuses urbanos, autobuses escolares, vehículos de recogida de residuos, construcción y reparto.
Ahorro
Testado durante casi cuatro millones y medio de kilómetros en flotas de clientes con distintas cargas de trabajo, todas han experimentado incrementos de hasta un 6% en el ahorro de combustible. Esta mejora en el ahorro de combustible ha generado un ahorro anual de 280 a 850 € por vehículo según aplicación, kilometraje anual y precio del combustible.