De los autobuses nuevos, 62 son híbridos, que sustituirán vehículos diésel y se añadirán a los 207 ya existentes de propulsión combinada eléctrica-térmica
Los 76 autobuses, parte de los cuales se han mostrado en la plaza Ernest Lluch del recinto del Fòrum, fueron adquiridos en 2017 por concurso público dentro del programa de renovación de la flota, por un importe global de 32,5 millones de euros. Prosigue, así, el esfuerzo inversor para rejuvenecer, actualizar y mejorar la fiabilidad de los vehículos que prestan servicio en la ciudad de Barcelona y el área metropolitana, iniciado en 2015.
De los autobuses nuevos, 62 son híbridos, que sustituirán vehículos diésel y se añadirán a los 207 ya existentes de propulsión combinada eléctrica-térmica, la más competitiva y contrastada de las tecnologías de reducción de emisiones en la automoción pesada. Barcelona pasa, por lo tanto, a tener 269 autobuses híbridos en el servicio urbano, si se suman los comprados y los que son fruto de la transformación de coches diésel y gas natural comprimido, es decir, un 25% de la flota (1.085) es diésel-eléctrica o gas-eléctrica.
Los autobuses híbridos están propulsados eléctricamente y generan la electricidad con un motor térmico auxiliar (funcionamiento en serie) o combinan la tracción eléctrica y la del motor diésel (funcionamiento en paralelo, el de los Volvo y Solaris). Así, los más avanzados logran reducciones de consumos y emisiones de un 30% o superiores. El ahorro en combustible resultante es de unos 7.600 litros de gasóleo por unidad y año.
De los 62 autobuses híbridos, 54 son articulados de 18 metros de longitud, de los mismos modelos de Volvo y Solaris que los existentes en la flota de TMB. Como todos los articulados incorporados desde 2015, cuentan con cuatro puertas, lo que permite que la subida de pasajeros se lleve a cabo a la vez por las dos delanteras, para agilizar las paradas. Los otros ocho autobuses híbridos son de dos pisos y 12 metros de longitud, los primeros vehículos ambientalmente avanzados del Barcelona Bus Turístic. Han sido fabricados por la firma Unvi, radicada en Galicia, sobre base mecánica Volvo.
Las incorporaciones se completan con 14 autobuses estándar MAN de gas natural comprimido, que sustituyen a vehículos de primera generación propulsados con el mismo combustible y, así, permiten mantener la operatividad de la cochera de la Zona Franca. Si en 2001 el gas natural fue la primera alternativa práctica al gasóleo, ventajosa por su escasa producción de contaminantes, hoy todavía aporta una alta calidad ambiental, puesto que los motores ahorran un 30% de las emisiones de óxidos de nitrógeno y prácticamente la totalidad de partículas en suspensión en comparación con un diésel Euro 6.
Como todos los autobuses que está adquiriendo TMB, los presentados poseen las características de confort y accesibilidad siguientes: Facilidades para personas con movilidad reducida: plazas reservadas, rampa retráctil, pulsadores para invidentes, piso bajo antideslizante; pulsadores de apertura inteligente de puertas; conectores USB para la carga de dispositivos móviles; aire acondicionado; e indicador lateral luminoso de nombre de línea y destino Los ocho híbridos de dos pisos del Barcelona Bus Turístic cuentan además con acceso vía WiFi a Internet con conexión directa y sistema de audioguía en 16 idiomas.
Nuevas adquisiciones
TMB seguirá incorporando más autobuses a lo largo de 2018, puesto que los fabricantes están terminando dos pedidos formalizados el año pasado y cuya previsión de llegada es entre abril y el verano: se trata, por un lado, de
siete articulados eléctricos de carga rápida por pantógrafo para la línea H16, y, por otro, de 43 coches híbridos de diferentes modelos, estos destinados a la ampliación del servicio. Con los 76 presentados, suman 126 autobuses nuevos con un valor global de 54,3 millones de euros.
Recientemente, TMB ha resuelto la adjudicación de otra partida de 127 autobuses, que llegarán entre finales de este año 2018 y principios de 2019. De estos, 23 serán para ampliación de la flota, uno para una prueba de transporte a la demanda y el resto para sustitución de coches diésel y de gas natural comprimido. Sumados a los 126 ya entregados o pendientes de entrega, llegaremos a la cifra de 253 autobuses nuevos en poco más de un año, el equivalente al 23% de la totalidad de la flota.