El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha declarado en estos días que el Plan VIVE (Vehículo Innovador-Vehículo Ecológico) no es suficiente para compensar la "fuerte caída" en la demanda que sigue experimentando el mercado automovilístico nacional, pero añadió que representa "al menos una ayuda" a los productores, en la línea con los programas adoptados en otros países europeos.
Durante su comparecencia ante el Pleno del Congreso de los Diputados para informar sobre los resultados del último Consejo Europeo celebrado la semana pasada, Zapatero quiso recalcar que el desplome de la producción está en proceso de desaceleración, en la misma línea que ha declarado Anfac. Del mismo modo, Zapatero recalcó que un 20% de las matriculaciones en España se acoge ya a las ayudas del VIVE, que hasta el 17 de marzo había contabilizado 27.000 operaciones, por un importe superior a los 262 millones de euros.
