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El Sistema Europeo de Autobuses del Futuro probará en Madrid los sistemas de información en el Bus VAO

Las líneas que circulan por la plataforma de la A-6 entre Majadahonda y Moncloa, bases de la práctica

lunes 27 de julio de 2009, 01:00h

EBSF, el proyecto de un Sistema Europeo de Autobuses del Futuro, es una de las principales acciones de I+D que se llevan a cabo en la UE relacionadas con el transporte de viajeros. El consorcio agrupa a 47 socios y cuenta con una dotación ed 26 millones de euros, coordinados por la UITP.

EBSF es una iniciativa de la Comisión Europea que se incluye en el 7º Programa Marco de I+D. El proyecto está coordinado por la UITP, recayendo en Umberto Guida su dirección y en Maeva Zebrowski su gestión del proyecto.

El principal objetivo de EBSF es incrementar el atractivo y mejorar la imagen del sistema de transporte urbano en autobús en las ciudades, mediante el desarrollo de nuevos vehículos y tecnologías combinados con las mejores prácticas operacionales. Para ello, es necesaria la implicación de usuarios, operadores, fabricantes y autoridades.

Hasta el año 2012 se desarrollará un programa (que culminará con un manual con las conclusiones) que tiene como particularidad el haber reunido a los cinco principales fabricantes del Sector (Irisbus Iveco, Volvo, Scania, MAN y Evobus). Seis ciudades europeas realizan los test que dan sentido a los objetivos principales: Rouen, Roma, Goteborg, Budapest, Bremerhaven y Madrid.

La participación de Madrid

La región de Madrid es la presencia española en EBSF.  Su aportación se centrará en la autopista A-6, la única que actualmente cuenta con un carril VAO. Admite cuatro líneas entre el intercambiador de Moncloa y Majadahonda. El principal objetivo es proporcionar a los usuarios de estas líneas información en tiempo real de posibles incidentes mientras están a bordo del bus, en el intercambiador de Moncloa, en la estación de ferrocarril de Majadahonda en la web, a través de sms y en algunas paradas, para promover el uso del transporte público y la elección modal.

Además, se probarán elementos de localización de los vehículos bajo tierra utilizando Wifi como soporte dentro de los intercambiadores, ya que los GPS no mantienen la comunicación en este entorno. La duración de la prueba será de seis meses, de la mano del Consorcio Regional y de Tekia como socio tecnológico. También participan los operadores de las líneas afectadas, Renfe y la concesionaria del intercambiador.