La producción de la Dodge Sprinter para el mercado norteamericano en la planta de Dusseldorf dio comienzo con ocasión de la introducción en el mercado en el año 2003. El lanzamiento supuso un desafío importante: no sólo por la necesidad de cambiar la marca de más de 400 vehículos acabados, sustituyendo el logotipo de Freightliner por el de Dodge y modificando en un complejo proceso la documentación de los mismos, sino también por la armonización de las diferentes filosofías de comercialización de Dodge y Mercedes-Benz. Por ejemplo: los clientes de Dodge podían encargar solamente paquetes formados por varios códigos, mientras que Mercedes-Benz ofrecía también la posibilidad de encargar códigos individuales. En la comprobación de la viabilidad constructiva se puso de manifiesto que no todos los paquetes eran posibles, y tuvieron que modificarse en la documentación.
Después de superar con éxito estos desafíos, la producción de la Dodge Sprinter en la planta de Dusseldorf, que comenzó con 5.000 unidades anuales en el año del lanzamiento, fue aumentando hasta un máximo de 19.111 en el año 2006.
A finales de 2009 la producción de la furgoneta Sprinter con logotipo Dodge en su parrilla dejó de fabricarse. En total salieron de las cadenas de producción de Dusseldorf 84.232 furgonetas Dodge Sprinter.