En el primero de ellos se hace seguimiento del proceso de renovación de las concesiones estatales que han tenido lugar desde la publicación, en septiembre de 2008, del Informe de la CNC "La competencia en el transporte interurbano de viajeros en autobús en España". Entonces, la CNC llamaba la atención sobre el marco poco favorecedor de la competencia en el que iba a tener lugar la renovación de las concesiones de cara a los concursos de los años siguientes y pedía modificaciones para introducir más competencia en los mismos, según un comunicado de la Comisión.
Tras el Informe de 2008, se introdujeron modificaciones en dicho marco en el que se recogieron algunas de las propuestas de la CNC. Sin embargo, analizadas esas modificaciones, la CNC considera que dicho marco y, como consecuencia, los nuevos pliegos de los concursos diseñados, siguen siendo altamente insatisfactorios desde el punto de vista de la competencia.
La evidencia obtenida a partir del resultado de los concursos celebrados permite constatar que el juego competitivo en los mismos es muy deficiente. De no introducirse cambios drásticos en los futuros concursos, las condiciones de competencia serían similares a los ya analizados. Si se limita o elimina el carácter competitivo en el procedimiento de acceso a las concesiones, se está perpetuando la renovación de las concesiones por su vigente titular sin suficiente tensión competitiva.
El segundo de los informes se refiere a las prórrogas de estas concesiones pero de titularidad autonómica. La CNC ha observado atentamente las actuaciones que muchas Comunidades Autónomas han adoptado en los últimos años en relación con las concesiones de su titularidad, arbitrando mecanismos para, en la práctica, prorrogar mediante diversos instrumentos normativos estas concesiones a sus actuales concesionarios.
Si los avances a nivel estatal pueden considerarse limitados, ni tan siquiera tal afirmación puede realizarse con la actuación de las Comunidades Autónomas. En general, la preocupación en esta materia ha sido la de cerrar el mercado, tratando de eliminar cualquier atisbo de liberalización, aunque viniera impuesta por el cumplimiento de las normas comunitarias.
Discrepancia total
La CNC discrepa totalmente tanto de la filosofía que subyace a dichas actuaciones, como de las condiciones concretas que en muchos de los casos se aplican a las prórrogas, por ejemplo, en lo relativo a la duración del plazo de ampliación, o al carácter automático, en la práctica, de su otorgamiento. Sin perjuicio de las acciones que los particulares afectados por dichas prórrogas pudieran adoptar, la CNC se reserva la posibilidad de emprender las medidas que considere oportunas de cara a instar la corrección de las mismas.
En este sentido, el Consejo de la CNC ha hecho llegar un primer requerimiento a la Comunidad Valenciana para que modifique su normativa. Si en el plazo de un mes no es atendido el requerimiento, se abriría la vía para que la CNC pudiera impugnar dicha regulación ante la jurisdicción contencioso-administrativa. Se están analizando también casos similares en otras Comunidades Autónomas.
