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Desembarco de material eólico de 50 metros de longitud procedente de Bélgica en el Puerto de Santander

La línea Santander-Zeebrugge supone 150 escalas anuales en cada puerto con un volumen de unos 15.750 trailers

viernes 14 de mayo de 2010, 01:00h

La nueva rampa doble del muelle de Raos 8 del puerto de Santander ha acogido el desembarque de una partida de palas eólicas de 50 metros de longitud procedentes del puerto belga de Zeebrugge. Llegaron a bordo del buque L´Audace, acompañadas de 250 vehículos, en una de las tres escalas semanales con la ciudad belga.

El Puerto de Santander cuenta con tres escalas semanales Santander-Zeebrugge. Esta línea, comenzó a funcionar el  mes de mayo del año pasado y supone 150 escalas anuales en cada puerto con un volumen estimado de tráfico de 15.750 trailers. Si se cumple el objetivo de llegar a las cinco escalas semanales, tal y como pretende la naviera, se conseguiría superar la cifra de los 25.000.

La utilización de la nueva rampa ro-ro de Raos 8 para la carga y descarga de mercancías de gran tonelaje comenzó a operar recientemente con el embarque de unas prensas para vehículos con dirección al mismo puerto de Zeebrugge y tendrá su continuación con el embarque, próximamente, de más material eólico con destino al puerto alemán de Cuxhaven.

Esta nueva línea con el puerto belga fue especialmente ideada para ofrecer un servicio puerta a puerta que conecte los tráficos con origen en la península Ibérica y con destino Escandinavia y el Báltico, aunque podría ampliarse a otras rutas. De este modo, la estrategia comercial que está impulsando el Puerto de Santander para ofrecer un servicio integral de transporte está dando sus frutos y permitirá partir de una posición privilegiada gracias al establecimiento de nuevos clientes una vez se haya superado la actual crisis económica.

Infraestructura apropiada

Tanto el Puerto de Zeebrugge como el de Santander ofrecen unas excelentes condiciones para el desarrollo de esta línea ya que cuentan con unas características técnicas apropiadas, infraestructuras especializadas para el transporte en buques ro-ro, y un inmejorable posicionamiento geográfico.

Cantabria y el Puerto de Santander culminan así una de sus principales aspiraciones al atraer a la región tráficos de mercancía que no disponían de las infraestructuras, servicio e instalaciones necesarias, y que optaban por otras soluciones.