Ambos centros, dotados con las últimas tecnologías y construidos para optimizar las operaciones de distribución y cross-docking que allí se desarrollan, encajan a la perfección con el proyecto Red Europe, una red de conexiones europeas entre todas las plataformas que posee, que le permite ofrecer un servicio regular de distribución de palés en 17 países de Europa, incluidos los países del Este.
Las aperturas se enmarcan dentro del plan de inversiones que Norbert Dentressangle ha llevado a cabo en los últimos cinco años, para renovar sus 22 plataformas de distribución en la Península Ibérica. El elevado ritmo de crecimiento que ha experimentado su servicio de paletería, cuya facturación alcanza hoy los 75 millones de euros anuales, ha hecho necesario que adapte todas sus instalaciones para garantizar el nivel de servicio a los clientes y cumplir con los planes de crecimiento de los próximos años.
Y es que sólo en el primer semestre de 2010, el volumen de negocios de la enseña de transporte en la península ibérica sumó 125 millones de euros, un 9% más que en el mismo período de 2009, crecimiento que supera el porcentaje registrado por la compañía en el resto de Europa.
Las nuevas plataformas
La primera de las instalaciones se encuentra situada en Forte da Casa, localidad perteneciente a la región de Lisboa. Se trata de un punto estratégico por su cercanía a las autopistas A-1 y A-2, que conectan la capital de Portugal con el norte y el sur del país. Esta plataforma cuenta con una superficie de 3.400 metros cuadrados, 1.500 de los cuales se destinan a actividades de distribución y cross-docking, 1.500, a almacenaje y los 400 restantes, a oficinas. La infraestructura, que posee capacidad para almacenar en estantería más de 1.600 palés, cuenta con 24 muelles de carga y descarga y con un depósito de gasoil propio destinado al abastecimiento de su flota.
La segunda de las plataformas, situada en Canelas, localidad de la región de Oporto, está reservada para actividades de distribución, cross-docking y transporte internacional, ya sea en régimen de carga completa o grupaje. Para ello cuenta con una superficie cercana a los 3.200 metros cuadrados, a los que hay que sumar los 6.500 metros en los que se distribuyen 50 plazas de aparcamiento, un surtidor de gasoil y un taller propio destinado al mantenimiento y reparación de la flota. Además, para la optimización de la actividad de cross-docking, las instalaciones cuentan con 20 muelles, 10 para remolques y otros 10 para vehículos ligeros. La ubicación de esta instalación al sur de Oporto conecta con dos de las principales autopistas del país, la A-1 y la A-29, sin necesidad de cruzar la ciudad. De esta forma, facilita las conexiones entre el norte del país con lanzaderas procedentes de distintos puntos de España y Portugal, sin atravesar zonas con tendencia a la aglomeración de tráfico, con el ahorro de tiempo y costes que esto supone.
